Los expertos expresaron el miércoles, en una reunión con responsables del Govern, sus diversas visiones de cómo se ha de afrontar el control de la pandemia.
Por una parte, el catedrático de Ingeniería Informática y Matemáticas de la Universitat Rovira i Virgili (URV), Àlex Arenas, es partidario de la opción B, que es «relajar las restricciones a cambio de hacer teletrabajo, teleeducación y test de antígenos masivos, sostenidos en el tiempo». La opción A es mantener las restricciones actuales, esperar a que baje la curva y volver a comenzar, por la que habría optado el Govern.
«Pero Salud hace caso a las recomendaciones de BIOCOMSC», el grupo de expertos de la Universidad Politécnica de Catalunya, que apuesta por mantener las escuelas abiertas para que los niños que no disponen ni de ordenador ni de wifi en sus casas puedan seguir las clases con normalidad. BIOCOMSC también considera fundamental extender todo lo posible el teletrabajo, que el Govern recomienda desde hace meses.
Arenas es partidario de suavizar restricciones a cambio del teletrabajo y la teleeducaciónArenas ha diseñado sendos planes de reapertura para los sectores de la restauración y la cultura, por fases, haciéndola compatible con los horarios de movilidad diurna y nocturna, aunque con condiciones. Así, los locales deberían disponer de medidores de CO2 certificados y visibles para los usuarios, para mantener los niveles del aire por debajo del límite recomendado; limitar la capacidad interior de los establecimientos a un máximo del 25%, indicando claramente lo que supone en número de clientes y controlar la temperatura de los empleados. Los clientes que coman en el interior deberían proporcionar el nombre completo, la dirección y el teléfono para usarlos en el caso de ser necesario un rastreo de contactos, y que todos los empleados lleven la mascarilla en todo momento, entre otras medidas de ventilación.
En el ámbito cultural, propugna la reapertura gradual, primero las que se puedan realizar al aire libre, y en interiores, por fases, limitando el aforo al 50% en butaca, escalonando las entradas en los espectáculos, eliminando el servicio de bar y que los espectadores sólo puedan dejar su asiento para ir al lavabo. Contempla su propuesta que los establecimientos tengan sistemas centrales de tratamiento de aire, medidores de CO2, y el mantenimiento de una humedad relativa de entre un 40-60% siempre que sea posible.
Por su parte, el infectólogo del Hospital Can Ruti de Badalona, Oriol Mitjà, acusa al coordinador de la Unidad de Seguimiento de la covid en Catalunya, el epidemiólogo Jacobo Mendioroz, de «frenar» el uso de antígenos, y por esta misma razón alaba la estrategia de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha pedido que se aplique en Catalunya.
