Curro Cañete es licenciado en Derecho, coach y periodista. Experto en éxito y felicidad y con formación en todo tipo de técnicas terapéuticas, lo que más le interesa es ayudar a los demás a superar sus bloqueos y límites mentales para que puedan vivir en paz consigo mismos. En 2019 publicó El poder de confiar en ti, que estuvo en el top ten de la lista de best-seller durante más de 40 semanas y del cual han hablado personajes famosos como Ricky Rubio o Nuria Gago, entre otros muchos. Su último trabajo es Ahora te toca ser feliz (Editorial Planeta), en el que reivindica el momento presente. IG: @currocanete; TW:@curroCanete
Escuchándole a usted, ser feliz parece fácil. Posible.
Es posible. Pero no creo que sea tan fácil en todas las situaciones.
En ‘Ahora te toca ser feliz’ defiende que uno de los motivos del cambio es una crisis. ¿El momento actual es ideal?
Sinceramente, ahora es un buen momento para ser positivos. Necesitamos vivir, pensar en nuestros sueños, necesitamos amar, enamorarnos. Todo esto con precaución, pero ya no podemos parar nuestra vida más o las consultas de los psiquiatras van a tener colas que no se han visto ni en el Museo del Prado un domingo por la mañana. Entonces, es muy importante que nos enfoquemos en positivo todo lo que podamos, cumpliendo las medidas de seguridad al pie de la letra, lo que nos dicen los expertos, que son los que saben.
Tiene seguidores ilustres a raíz de su primer libro. En este segundo, ¿qué más explica?
Llegan los refuerzos. Cada septiembre van a llegar refuerzos. Yo escribo a todas horas. Estoy en el supermercado viendo una lata y tengo que soltarla y ponerme a escribir. Es algo muy difícil de gestionar. Lo que quiero decir es que tengo para 500 libros porque no paran de llegarme las ideas.
«No podemos parar más nuestra vida o los psiquiatras van a tener colas que no se han visto ni en el Museo del Prado»
¿Cómo son esas ideas?
Mi propósito de vida siempre es el mismo, ayudar a la gente. Con Ahora te toca ser feliz tienen que entender que el momento de ser feliz es ahora porque mañana será mañana. Nuestra felicidad tiene que ser nuestra compañera de viaje ya que cuando la pierdes, estás perdido. Tu felicidad es tu paz interior. Si la pierdes media hora o cinco minutos no pasa nada. Tienes un día negro, pues al día siguiente te levantas, vas a tu trabajo y te reconcilias con tu pareja, pero el gran problema es que la mayoría de los días sean infelices, que se esté yendo hacia lo que yo llamo el caos tenebroso en lugar de hacia tus sueños.
¿Cómo le dice esto a una persona que lleva una mochila cargada de muchas experiencias negativas?
Afortunadamente, esa persona es la primera que se tiene que leer el libro porque soy un escritor que se expone. Yo vivo como si me pudiera morir en cualquier momento, me da exactamente igual y cuento todos los tormentos que pasé en mi infancia.
¿Se refiere a la muerte de su hermano?
Sí. Cuento cómo murió mi hermano, cómo se quitó la vida. Cuento lo mal que lo pasé en numerosas ocasiones porque yo estaba en el armario, se reían de mí y cuento cómo he ido superando todas esas cosas. No lo escribo por mí, porque estoy en paz con mi pasado y estoy bien. Lo hago para que la gente entienda que por muy mal que esté en este momento siempre pueden reconstruir su vida. Efectivamente, si es una persona que acaba de salir del coma o que lleva cinco años enganchada a las drogas, tiene más trabajo. Pero es posible. Todo el mundo puede empezar a caminar hacia la dirección correcta.
¿Y si no sabe lo que quiere?
Esa persona, en lugar de irse todos los fines de semana de cañas desde el viernes hasta el domingo para aturdirse y seguir sin pensar, debería quedarse en silencio, aunque fueran 15 minutos, hacer los ejercicios que propongo en el libro y preguntarse cosas tan sencillas como qué es lo que quiero hacer con mi vida, cuál es mi sueño más importante.
¿El qué dirán es lo que más nos impide ser felices?
Sí, pero yo estoy muy cansado del qué dirán. Afortunadamente, ya me he liberado porque estaba completamente preso. El qué dirán es como una cárcel. Pero a diferencia de las otras prisiones en las que las llaves las tiene el carcelero, en el qué dirán la llave la tienes tú y solo tienes que salir por esa puerta. Recomiendo salir cuanto antes mejor porque no hay tiempo que perder. ¿Cuánto van a esperar para poder hacer lo que quieran? Hay un capítulo en el libro en el que animo a los lectores solteros que quieran pareja a abrirse una cuenta de Tinder porque hay gente que hasta eso le da vergüenza. Y conozco a algunos que ya lo han hecho. Imagínate la de parejas que van a salir solo gracias a la lectura deAhora te toca ser feliz. Es maravilloso.
¿Esta mentalidad implica un cambio social?
Para mí el cambio parte de uno mismo. Tú no vas a poder cambiar la sociedad, tú vas a poder cambiarte tú y desde tu ejemplo estás contribuyendo a que la sociedad cambie. Pero no puedes ir por ahí intentando cambiar la sociedad. A ver por dónde empiezas, es un trabajo muy grande. Es mejor empezar a cambiar por uno mismo y que los demás hagan lo que quieran, pero tú haces lo que consideres.
¿El jefe es el cerebro?
No. El jefe eres tú. Tú eres más que tu cerebro y puedes decirle lo que tiene que hacer.
Pero tiene que estar fuerte.
Exacto. Tienes que entrenarlo para que esté fuerte, pero no puedes dejarlo a la virulé. Hay que conseguir que tu cerebro sea tu amigo, esa es la mayor meta en la vida. Que no te diga lo mal que estás, como le dice a mucha gente. Yo no le permito a mi cerebro que me diga eso. Le dejo las cosas claras en un segundo. ¿Por qué me voy a decir eso si estoy trabajando en mí mismo, en mi vida, hago deporte, me entreno y estoy intentando hacerlo lo mejor que puedo? Soy un ser humano que está aprendiendo a vivir y esto es digno de amor y de atención. Todos somos dignos de amor y de atención.
El qué dirán es como una cárcel. Pero a diferencia de las otras prisiones en las que las llaves las tiene el carcelero, en el qué dirán la llave la tienes tú y solo tienes que salir por esa puerta.Habla también de perdonar. ¿Es fácil?
Es muy fácil. Si alguien quiere perdonar y quiere venir a uno de mis Workshop, planteo una meditación de media hora en la que perdonamos todo y te quedas en paz. Aunque cada vez los hago menos porque los libros son los jefes. Los que sí mandan son mis libros, que me reclaman tiempo. Al perdonar, el que se está liberando eres tú. Y todo el que te hizo algo, lo hizo sin tener ni idea de lo que hacía porque estaba confundido, porque tenía miedo.
O no...
Cada persona tiene sus circunstancias. Pero lo que importa es el presente y lo que quieres construir a partir de ahora.
Del libro se desprende que tenemos que relativizar.
Claro. No hay que tomarse tan en serio las cosas. Si se te cae el Iphone nuevo y se te rompe en mil pedazos, no hagas un drama, no es para tanto. Pues te compras otro o uno de 40 euros, de segunda mano.
Y los retos, ¿tienen que ser pequeños?
No, ¿por qué?
Porque si son demasiado grandes y no se llega... Mal se empieza.
No. Si tú apuntas a las estrellas vas a llegar más lejos que si apuntas al techo de tu casa. Es una cuestión de honestidad, de que reconozcas lo que deseas, no de si está lejos o cerca. Porque a lo mejor lo que desea una persona es estar con sus hijos. No hay límites sobre lo que se puede desear.
¿Todas estas reflexiones tienen que ver con la edad?
No. Me escribe muchísima gente joven. Cuanto antes se aprendan, mejor. Yo a los 32 años aún estaba preso de mis miedos, el qué dirán me tenía cogido por la yugular y sinceramente, si me hubiera liberado a los 18, pues mejor. Estoy contento de ser libre. Pero en mi caso, como tenía que escribir estos libros, estuvo bien así.
