Tras una jornada de caos circulatorio y ferroviario a causa de las incidencias y cancelaciones por la dana, el escenario que se presenta para este jueves por la mañana mantendrá todavía importantes afectaciones que complicarán especialmente la movilidad para los usuarios del Baix Camp y Terres de l’Ebre que tengan que viajar a Barcelona.
Por causas desconocidas, este miércoles se registró una avería fruto de una caída de la alimentación en la catenaria entre L’Ametlla de Mar y L’Hospitalet de l’Infant. El problema ya estaría solucionado. Pese a ello, esta incidencia impedirá que los convoyes de la R-16 puedan circular entre Tortosa y Tarragona hasta que no se haya llevado a cabo una exploración del lugar de los hechos que confirme que la infraestructura está en condiciones, tras las intensas lluvias que han caído en la zona.
Esto también afectará al servicio Avant desde Tortosa y con parada en Cambrils que, según ha confirmado Rodalies Catalunya, no circulará por estas estaciones, lo que obligará a los usuarios a desplazarse a Camp de Tarragona.
La situación es complicada. Desde Tortosa tan solo podrá llegarse a Barcelona utilizando los autobuses directos. En cuanto a las estaciones de L’Hospitalet de l’Infant y Cambrils, los usuarios tendrán a su disposición los buses del Pla d’Alternatives de Transport hasta Sant Vicenç de Calders, que tienen una frecuencia cada dos horas. «Desde Renfe nos han dicho que se intentará reforzar el servicio con alguna expedición adicional, pese a ello, a estas horas todavía no tenemos confirmaciones y la gente está muy nerviosa intentando buscarse la vida para poder llegar mañana a trabajar», ha asegurado la portavoz de Dignitat a les Vies, Ana Gómez Llauradó.
Una de las opciones que tendrán a su disposición los viajeros de Cambrils que no puedan ir a Camp de Tarragona serán los servicios interurbanos de la empresa Plana que llegan a la estación de Tarragona, y desde allí podrán hacer transbordo y coger uno de los autobuses directos a Barcelona.
En cuanto a Vila-seca, este municipio tampoco dispondrá de trenes. Pese a ello, desde 6.07 de la mañana, cuando sale el primer autobús, hay frecuencias prácticamente cada treinta minutos. Como alternativa también tendrán los trenes que enlazan con Reus.
«Entendemos que si hay restricciones es por alguna cosa, pero estas siempre tienen que ir acompañadas de una solución», ha lamentado Gómez Llauradó. La indignación de los usuarios que han tenido que viajar este miércoles ha ido in crescendo a medida que ha ido avanzando el día. «Ha faltado muchísima información», apuntan desde la plataforma.
Muchos usuarios se han encontrado que, ya sea porque son servicios esenciales o porque no han tenido la posibilidad de teletrabajar, habían salido a primera hora de la mañana de casa y al mediodía se había suprimido el servicio de autobuses, por culpa del caos circulatorio originado en la AP-7, que ha impedido garantizar el flujo de vehículos.