El antiguo aparcamiento Battestini acelera para convertirse en el futuro eje de movilidad de Tarragona, centralizando el transporte interurbano, los buses de la EMT y, a medio plazo, el tranvía del Camp de Tarragona. Ayer se dio el primer paso para configurar el nuevo nudo intermodal de conexiones, después de que la Empresa Municipal de Transports trasladara este lunes al céntrico recinto paradas de siete líneas que, hasta este pasado domingo, estaban ubicadas entre las calles Prat de la Riba y Pere Martell.
Se trata de un proceso que se inicia este mes de marzo con las líneas 3, 5, 6, 30, 34, 54 y 85, y que se ampliará a lo largo de todo el año, con la llegada de otros trayectos. Según indica la presidenta de la compañía pública, Sonia Orts (PSC), la segunda fase de la puesta en marcha del Plan Battestini será en junio, con la mudanza de los puntos de embarque y bajada de Pere Martell, mientras que la tercera culminará a finales de este año con la aplicación del informe sobre paradas y trayectos de todo el servicio que se está elaborando.
Durante estos primeros días, tres informadores avisan a los usuarios de Prat de la Riba y Pere Martell 5 para alertar que los vehículos de la EMT ya no paran en esos puntos. Aparte, en las paradas hay carteles informativos y se avisa a los usuarios vía APP y la página web. «Por la noche habrá un informador en Prat de la Riba, ya que no es lo mismo perder un bus durante el día que el último del día», recalcaba Orts.
«Se ha hecho un buen trabajo para informar. Todos los cambios requieren tiempo, pero se han producido pocas incidencias», indicaba ayer el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales (PSC), quien destaca que la apuesta por el intercambiador «será positiva, tanto para los conductores como para los pasajeros», especialmente porque el espacio para realizar los cambios de turno es más amplio, mientras que los usuarios tendrán ahora parada con bancos.
«Con los buses y el tranvía, Battestini será un centro neurálgico metropolitano»
Rubén Viñuales
Alcalde de Tarragona
Durante esta primera fase, los buses entrarán todos por la calle Pere Martell, mientras que la salida se hará exclusivamente por la Avinguda Roma. Será a partir de la segunda fase, con la implementación de todos los espacios de Pere Martell, cuando los vehículos empezarán a entrar también desde la Avinguda Roma una vez haya culminado la reordenación de tráfico.
Parada del TramCamp
La llegada de la EMT a Battestini es un paso importante para convertir el recinto en un eje de movilidad. Los buses municipales se suman a los interurbanos, que siguen protagonizando gran parte del espacio. A todo ello, está previsto que, a medio plazo, también llegue el tranvía. La segunda fase del TramCamp prevé la llegada a Tarragona desde Vila-seca, con un ramal que vendrá desde la Avinguda Roma, y que tendrá una parada en Battestini. «Battestini será un centro neurálgico metropolitano», resalta el alcalde.
Desde este punto, el trazado discurrirá por la plaza Alcalde Lloret y Enric d’Ossó, hasta la Rambla Francesc Macià, donde se contempla una bifurcación: uno de los ramales seguirá por República Argentina y Avinguda de Catalunya, hasta el Camp de Mart; mientras que el otro avanzará hacia la zona de Joan XXIII, para ir a Països Catalans, antes de terminar en la Plaça de les Amèriques, de Sant Pere i Sant Pau.
Dudas iniciales
«¿Dónde puedo coger el número 85?». Esta era la pregunta que hacía ayer Montse, quien esperaba como siempre el bus en Prat de la Riba. Por su parte, Antonia reconocía que «me acabo de enterar del cambio, en la APP no me sale nada» mientras buscaba la parada del número 5 ya en Battestini. Por su parte, Lourdes buscaba el 54 para ir a Bonavista. «¿Han cambiado la parada?», preguntaba a un informador. Todas, esto sí, destacaban la mejora del cambio.
Desde las asociaciones vecinales hay divergencia de opiniones. Mientras que desde el Port Maria Carme Puig destaca que la iniciativa «eliminará mucho tráfico del centro», desde la Federación de Vecinos (FAVT) se lamenta que «la información en las paradas en los días previos ha sido bastante deficiente», según recalcaba José Martín Carrasco. Desde Campclar, Marc Colilla cree que el cambio «es positivo, pero incompleto», ya que «no es útil que el desplazamiento entre paradas sea corto si se debe esperar demasiado porque los horarios no son cómodos».
«La información en las paradas en los días previos ha sido bastante deficiente»
José Martín Carrasco
Federación Vecinos (FAVT)
Críticas de ECP
La puesta en marcha de Battestini generó críticas por parte de En Comú Podem. «Ahora no es un intercambiador, es un interbajador. Este proyecto demuestra la improvisación que el gobierno somete a la empresa y la falta de liderazgo en movilidad sostenible», indica el portavoz, Jordi Collado.
Jordi Fortuny (ERC) recuerda que es un proyecto «previsto por el gobierno republicano» y avisa que «estaremos alerta de que todo vaya según lo planeado». Finalmente, Jordi Sendra (Junts) aprueba el cambio porque «servirá para dignificar las paradas de Prat de la Riba, que sufrían aglomeraciones». Battestini acelera a la espera del tranvía.