Un presunto ladrón de 21 años terminó esposado este lunes día 11 por la Guàrdia Urbana y acusado de un delito de robo con violencia.
Los hechos se conocían este lunes a las 20.15 horas. Un joven de 21 años estaba recorriendo los pasillos de un supermercado situado en la calle Arquebisbe Josep Pont i Gol cuando otro cliente vio que robaba un artículo.
El otro cliente fue tras él y lo paró para evitar el robo. El delincuente se revolvió para zafarse y escapar. Por ello propinó un puñetazo en la cara del cliente y éste, a pesar de la agresión, lo retuvo hasta la llegada de los agentes.
Dos patrullas de la Guàrdia Urbana tardaron pocos minutos en acudir a la emergencia. La comisaría está a escasos 50 metros del supermercado.
Los agentes vieron como el presunto autor estaba en el suelo retenido por el cliente agredido. Los policías cogieron el relevo y se llevaron al presunto autor hasta la comisaría acusado de robo con violencia e intimidación.