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Mossos persigue a las ‘mimosas’, ladronas de oro de guante blanco

Así se conoce a las mujeres que se ganan la confianza de hombres mucho mayores que ellas para robarles collares, anillos o relojes

27 diciembre 2024 14:28 | Actualizado a 28 diciembre 2024 07:00
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Ella, unos cuarenta años más joven, le propuso mantener relaciones sexuales y él, no se lo pensó. Accedió a llevarla a su piso y ella, antes de ponerse manos a la obra, le conminó a asearse. Mientras él se duchaba, pensando que iba a pasar el día de su vida, ella tenía otros planes. Y los puso en marcha. Los minutos que estuvo el hombre lavándose ella los aprovechó para intentar sustraerle todo lo que pudo. El hombre escuchó ruido, salió de la ducha y, cuál fue su sorpresa cuando se encontró a la que iba a ser su amante por una noche robándole sus pertenencias. Al pedir explicaciones, todavía sin la ropa puesta, ella le empujó. Él, debido a su edad, más de 70 años, no pudo levantarse con la agilidad suficiente como para frenarla y ella pudo huir con el botín. O, al menos, con parte del tesoro que quería llevarse.

Esta no es la forma habitual en la que se desarrollan los llamados robos por el método de La Mimosa, aunque previamente, tanto el anciano como la joven sí que tuvieron un contacto en la calle que se asemeja al modus operandi de este tipo de fechorías que se están extendiendo en varios lugares, como en la provincia de Tarragona. Tanto en la ciudad como en municipios cercanos a la playa. Por eso de que, en caso de huir, haya menos tumulto de gente y más vías de escape.

Este hombre y la chica, de nacionalidad rumana, se habían encontrado previamente en la calle. Ella, sin conocerle de nada, se lo fue ganando poco a poco, hasta que consiguió convencerle de que era el ser más maravilloso del mundo y que quería mantener relaciones sexuales con él. Aquí entran los dos actores protagonistas en el robo con el método de La Mimosa. Un hombre mayor y una mujer joven, casi siempre de nacionalidad rumana. Así lo destacan desde la Unidad de Investigación de los Mossos d’Esquadra de Tarragona. Detallan que «estas chicas eligen a hombres mayores porque tienen menos capacidad para defenderse y también les cuesta más reconocer a alguien que ha cometido un hecho delictivo».

¿Qué buscan?

Pero ¿cuáles son los objetivos de estas mujeres? Principalmente «relojes o collares de valor». Y, ¿por qué le llaman el método de La Mimosa? Muy sencillo. Porque «ellas se acercan, se ganan a la persona ya sea con abrazos o gestos de cariño, la engañan y luego se llevan los objetos de valor», tal y como apuntan los Mossos. Habtualmente, el modus operandi de estas delincuentes no suele ser el que se indicaba al inicio de este artículo. Todo suele acontecer en la calle. Cada vez pierden más el miedo a llevar a cabo esos hechos delictivos. «Su objetivo principal no es cometer un robo con violencia, sino cometer un hurto, o sea, aprovecharse de un descuido para sustraer algún objeto. Ahora bien, si tienen que ejercer violencia, lo van a hacer. Si una persona mayor se cae, se puede romper la cadera y acabar en algo muy grave», continúan las mismas fuentes de los Mossos, las cuales apuntan que «cuando la víctima ofrece resistencia, ya pasa a tratarse de un robo con violencia».

Funden el oro

Collares de oro, relojes Rolex y todo tipo de mercancía de oro. Estos tres productos son el principal objetivo de las delincuentes, ya que, «en el caso del oro, lo pueden fundir y vender rápidamente. Aunque el Rolex tenga su número de serie, también lo funden o lo venden en el mercado negro», destacan los Mossos. Es una actuación muy rápida y, en muy pocos casos, el propietario recupera sus joyas.

Algunas se ofrecen sexualmente a hombres que aceptan y acaban siendo desvalijados

Robar una cadena de oro mediante un abrazo es visualmente factible. La mujer abraza al hombre y, con los brazos en la espalda del mismo, desencalla el mecanismo y se lo lleva. Pero, ¿cómo se roba un reloj que está en la muñeca de alguien? Así lo explican desde Mossos: «Saben hacerlo. Abusan de su confianza, le siguen, estudian incluso cómo se llama y tienen formas de sustraer relojes de la muñeca».

El Grupo de Delincuencia Urbana (Fura) de la Comisaría de Tarragona de los Mossos d’Esquadra —agentes de paisano que se dedican a peinar la calle a diario— es la que se encarga de intentar evitar estos delitos o ayudar a que se reduzcan lo máximo posible. Además, también ayudan mucho las cámaras que hay en las entradas de los municipios, ya que captan matrículas de coches que entran y salen en cada momento. Pero ¿por qué es tan importante? El caso es que estas mujeres acostumbran a ir acompañadas de alguien que las espera en el coche. «Algunas veces sabemos que es su pareja», explica el responsable de Mossos.

Mossos: «Saben hacerlo. Abusan de la confianza d elas víctimas, le siguen y estudian incluso cómo se llama»

Cuando consiguen el ansiado botín, suben rápidamente al coche y se marchan, abandonan el municipio en poco tiempo. No les conviene que se les vea demasiados días seguidos en un mismo pueblo, ya que les podrían identificar. Por ello, municipios como Roda de Berà, Torredembarra, Creixell, Altafulla o Coma-ruga, en El Vendrell, son lugares habituales para este tipo de delitos. «Casi todos los casos que acaban en delito de robo con violencia acaban resueltos. Hay que tener en cuenta, además, que la mayoría se quedan solo en hurtos y más o menos este año se ha mantenido el número de casos respecto al pasado» en lo que se refiere a la provincia de Tarragona. El método de La Mimosa se puso de moda hace unos 8 años, según los agentes.

Mucho cuidado, por ejemplo, si te preguntan por una calle. «Hay un caso de un señor que salió a sacar la basura, se le acercó un coche con dos personas, el copiloto, una mujer, le preguntó por una calle y, cuando el hombre se apoyó en el coche para ayudarles, se quedó sin reloj», apuntan las mismas fuentes.

Hurto o robo con violencia

«En algunos casos hemos realizado requerimientos de personas que han robado joyas de este modo aquí, y nos han aparecido en Francia, Islas Baleares o Valencia, lugares donde pueda haber mucho tumulto de gente durante alguna época del año para tener más posibilidades de éxito», apuntan desde Mossos. «Solo en un caso hemos visto que la víctima era una mujer, con lo que siempre o prácticamente siempre se trata de hombres mayores», dicen. ¿Cuándo es hurto y cuando es robo con violencia? Es sencillo. El mismo responsable de la policía catalana define el hurto, coloquialmente, como el momento en el que te roban «y no te enteras». En definitiva, «es un hecho delictivo en el cual, en un solo golpe, puedes ganar mucho dinero».

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