Las primeras horas de un paciente grave son las más delicadas en el proceso de curación. Y en el caso del adolescente de Reus, que este martes se precipitó desde una cuarta planta del col·legi Sant Josep de Reus, se temía por su vida dada la altura y la gravedad de las heridas diagnosticadas. El alumno cayó desde una ventana tras romper el cristal con un martillo antiincendios
Fuentes médicas han informado esta mañana de miércoles que el adolescente ha superado la parte más crítica. Las lesiones sufridas en las extremidades y cabeza son graves, pero reversibles.
En el caso de la cabeza, la lesión está ubicada en la mandíbula y no en el cráneo, por lo que la recuperación será aparentemente sin complicaciones. Además, el adolescente está consciente y no intubado en la UCI del hospital Joan XXIII.
Durante el día de ayer, el alumno de Reus pasó por el quirófano y se descartó una lesión medular, otra buena noticia tras una tarda complicada en el quirófano. El resto de lesiones son fracturas que con el tiempo sanarán. Sin embargo, la caída fue aparatosa y hay que estar pendiente de que no hubiera alguna lesión todavía por detectar.
Fuentes consultadas por el Diari explican que la caída quedó amortiguada por la claraboya, lo que evitó que el adolescente sufriera lesiones más severas e incluso perder la vida. La rapidez del aviso y de la actuación del SEM también ayudaron a que pudiera atenderse al herido de forma diligente y eficaz.