Un hombre que violó en dos ocasiones –una de ellas en Altafulla y la otra en un hotel del aeropuerto de Barajas– a su compañera sentimental cuando estaba ebria ha sido condenado a cuatro años de prisión por dos delitos contra la libertad sexual, con la atenuante de reparación del daño –ingresó antes del juicio 15.000 euros para pagar la indemnización a la víctima– y dilaciones indebidas, y la agravante de parentesco.
Así se recoge en la sentencia de conformidad dictada por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Tarragona.
El acusado, con antecedentes penales –pero no relacionados con este tipo de hechos–, mantenía una relación sentimental con una mujer, la cual vivía en Altafulla. El 18 de enero de 2020, sobre las dos de la madrugada, el acusado y su compañera se encontraban en el domicilio de otra pareja.
Una vez realizados diversos juegos y haber bebido bebidas alcohólicas, el acusado acudía continuamente al baño junto con su expareja «con ánimo libidinoso». La mujer necesitaba hacer sus necesidades y continuamente le indicaba a él su negativa a realizar cualquier acto de carácter sexual, sin que éste se produjera.
Sin su consentimiento
Posteriormente, mientras la mujer se encontraba en el sofá del comedor, puesto que se encontraba gravemente influenciada por el consumo de bebidas alcohólicas, el acusado, sin ejercer violencia ni intimidación, y sin contar con su consentimiento, le realizó tocamientos y otras prácticas sexuales.
La noche del 15 al 16 de noviembre de 2019, el acusado y la denunciante se encontraban en un hotel de Barajas. Él, sabiendo que su pareja había consumido mucho alcohol, sin emplear violencia ni intimidación, volvió a mantener relaciones sexuales, a pesar de la negativa manifestada por la perjudicada.
Además de la pena de prisión, el acusado durante tres años no podrá comunicarse ni acercarse a menos de 300 metros de la víctima, estará cinco años en libertad vigilada y la tendrá que indemnizar con 25.000 euros