Un hombre que le tocó primero la nalga y después de cintura a la ‘novia muerta de PortAventura ha sido condenado al pago de una multa de 8.100 euros como autor de un delito de abuso sexual. Se ha tenido en cuenta la atenuante de dilaciones indebidas.
Asimismo, indemnizará a la víctima con 500 por el daño moral ocasionado. Así se recoge en la sentencia de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Tarragona, que confirma la emitida por el Juzgado de lo Penal 2 de Tarragona.
El 5 de octubre de 2019, el acusado, en compañía de un amigo y dos amigas, acudieron al parque temático, donde se celebraba la fiesta de Halloween. Mientras el grupo hacía cola para entrar en la atracción Isla Maldita, surgió la opción de tomarse fotografías con una de las figurantes que había en el parque, que iba disfrazada de ‘novia muerta’, con un vestido blanco, maquillada de acuerdo con el disfraz y llevando una máscara que le cubría ojos y nariz, no así la boca.
El acusado se tomó dos fotografías con la víctima. En la primera, sin contar con su consentimiento, «con ánimo de satisfacer su deseo sexual», le colocó su mano izquierda en la nalga derecha de la mujer, subiéndola posteriormente a la zona de la cintura.
A repetirlas
Dado que alguna de las fotografías tomadas había salido movida, algunos del grupo posaron de nuevo para repetir las instantáneas.
El acusado volvió a ponerse y agarró con su mano izquierda el glúteo de la mujer y le apretó la zona, en una acción instantánea de abrir y cerrar la mano, a la vez que decía: «Mira como me pones». La mujer salió corriendo hacia el vestuario. Muy nerviosa y afectada, explicó lo ocurrido a sus compañeros de trabajo, que avisaron al personal de seguridad del parque.
En el recurso de apelación, el acusado decía que la mujer, a lo largo del procedimiento, había incurrido en contradicciones, por ejemplo sobre quien había en la zona junto al acusado o quien realizó las fotografías, circunstancia que los magistrados consideran irrelevantes.
Tampoco se mostraba conforme con el delito del que se le acusaba sino a lo sumo de un delito de vejación injusta de carácter leve.