Las obras de rehabilitación patrimonial de Mas Totosaus, en la calle de Frida Kahlo –delante del CAP Sant Pere de Reus–, han culminado. Faltará equipar el interior, habilitar una rampa exterior para garantizar el acceso y arreglar el entorno en una segunda fase. Todo para acabar convirtiéndose en un nuevo Servei d’Atenció i Orientació a les Famílies. Paralelamente, el Ayuntamiento ya trabaja en el desarrollo de su entorno y, más concretamente, de los terrenos privados contiguos, donde se proyectan viviendas, zonas verdes y nuevos viales de plataforma única.
Se trata de lo que fue la antigua fábrica La Coromina Industrial. En 2019 se procedió a derribar las antiguas naves y ya se hablaba de este desarrollo urbanístico. Pero es ahora que «nos encontramos en disposición de aprobar inicialmente el proyecto de urbanización de este entorno», ha explicado esta mañana la concejala de Urbanisme, Marina Berasategui.
Mas Totosaus quedará integrado en este nuevo espacio público de la ciudad, del que todavía no se han dado a conocer más detalles. En todo caso, el alcalde, Carles Pellicer, asegura que la aprobación del proyecto será este mandato, por lo tanto, antes de las elecciones municipales del próximo mes de mayo. La zona a desarrollar está delimitada por las calles Pau Font de Rubinat, Roger de Belfort, Camí de Riudoms y la avenida Països Catalans. Dispone de una superficie de unos 20.000 metros cuadrados y, según anteriores informaciones, 6.000 m2 serían para zonas verdes.
Poner en valor el patrimonio
Sobre Mas Totosaus, la rehabilitación ha servido para reparar las patologías que presentaba el edificio, adaptarlo a su nueva función como centro de atención a familias y también a las actuales exigencias de accesibilidad y seguridad. Pero es también una forma de poner en valor el patrimonio. Proyectado por el arquitecto reusense Pere Caselles en 1906, es de estilo modernista con alto valor histórico. Fue usada, sobre todo, como casa de verano.
Tras 20 años de abandono, finalmente el Ayuntamiento decidió llevar a cabo todo un proceso de rehabilitación y darle un uso municipal para, así, valorizarla de nuevo. Todo el proceso de adecuación se ha llevado a cabo por un importe de 234.584,89 euros (incluyendo los trabajos ya culminados y los que ahora se iniciarán en segunda fase). Paralelamente, el Ayuntamiento tiene abierta la licitación del contrato de suministro del mobiliario por 33.422,15 euros.
En cuanto a los trabajos llevados a cabo, se ha procedido a garantizar la seguridad estructural del edificio y se han renovado instalaciones. Otras actuaciones se han centrado en la rehabilitación funcional y restauración, impermeabilizando la cubierta, restauración de pavimentos, fachadas... La estructura de los muros se ha conservado. La sala central será destinada a espacio polivalente y de reuniones; las dos salas posteriores serán despachos y la contigua al porche será destinada a almacén. Donde había la antigua cocina, se ha habilitado un baño adaptado, mientras que el sótano es aprovechado como espacio de instalaciones.