La Associació de Veïns Primer de Maig de Reus trasladó ayer su preocupación al Diari, destacando que la madrugada de este pasado viernes quemaron «un coche más» y, desde la misma entidad, aportaron que «en cuestión de un mes, han quemado tres, y ya estamos hartos, del incivismo».
En cuestión de seguridad, «el Ayuntamiento de Reus, y en particular la concejalía de Seguretat Ciutadana i Convivència, no actúa», lamentó el presidente de la asociación vecinal, Eduardo Navas, refiriéndose a la zona de Mas Pellicer.
Todo ello, se produce en la misma semana en que se ha hecho un balance positivo, por parte de la administración local, en materia de seguridad.
«Si no es una cosa un día, es otra». Esto último Navas lo acota porque, «hace más de una semana, además, que pedimos al Ayuntamiento que nos repusiese el cristal de la marquesina de la parada de autobús de la calle de Mas Pellicer (la número 179, Sant Josep 1), que está completamente roto, y aún estamos esperando».
«No nos ofrecen una solución y, aquí, los vecinos se mueren de frío por las mañanas, especialmente la gente mayor», cuenta el representante vecinal. Y más allá de eso, «queremos que lo que se rompe, se arregle rápido. ¿Qué tiene que suceder para que nos hagan caso?».
La carta
Este medio se hizo eco este pasado lunes 26 de febrero, por otro lado, de las quejas de los vecinos de esta misma entidad vecinal en materia de seguridad y, por entonces, hicieron pública una carta que había sido enviada a la alcaldesa de Reus, Sandra Guaita –según los vecinos, hacía relativamente poco– y, en ella, la asociación pedía tener más atenciones.
«No dejaremos de reclamar los servicios que, por derecho, tiene cualquier ciudadano y de manifestar las carencias que, como barrio, tenemos desde hace décadas: nos sentimos abandonados», dijeron en la carta. También recordaron que hay que arreglar aceras, «hay más raíces que asfalto» y que las señales horizontales «son inexistentes».