Una pareja denuncia al dueño de una inmobiliaria de Reus por estafarle 1.500 ==euro==

El matrimonio, de nacionalidad argelina, dio esta cantidad de paga y señal, sin que el piso haya acabado siendo suyo. Los afectados conocen más casos, también de inmigrantes

19 mayo 2017 21:40 | Actualizado a 22 mayo 2017 13:07
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«Se ha quedado con nuestros 1.500 euros y nosotros sin el piso que se comprometió a vendernos». Son palabras de Hamza Abdessalem Bachouche, un joven de nacionalidad argelina que ha denunciado al propietario de una inmobiliaria de la avenida Jaume I por presunta estafa.

Los hechos se remontan a principios del pasado mes de agosto, cuando Hamza y su mujer se interesaron por el anuncio de un piso en venta de la calle de Miró. «Vimos el anuncio y llamamos por teléfono interesándonos. Rápidamente quedamos con el hombre de la inmobiliaria para ver la vivienda. Fuimos y nos gustó. Además, el precio que marcaba, de 12.800 euros, era asequible para nuestros bolsillos», recuerda al Diari este joven matrimonio.

Nada más visitar el piso, el dueño de la inmobiliaria pidió a los dos jóvenes una paga y señal de 1.500 euros. «Pasamos al día siguiente por la oficina de la avenida Jaume I y le pagamos los 1.500 euros de paga y señal, después de firmar un contrato por este pago», añade el joven argelino. Era el 13 de agosto y a partir de ese día empezó un auténtico calvario para este matrimonio. «Nos dijo que nos teníamos que esperar a tener los permisos del Ayuntamiento para hacer unas reformas que necesitaba el piso y a partir de aquí nos fue dando largas hasta la semana pasada», añade Hamza.

Bajo la sospecha de que habían sido estafados, la pareja fue hasta el registro de la propiedad a pedir información del piso que habían comprado y se encontraron con la sorpresa de que era propiedad de una mujer que ni conocían y de la que nunca les había hablado el dueño de la inmobiliaria. Los días iban pasando y cada vez era más complicado hablar con el hombre en cuestión. «También fuimos al Ayuntamiento y en Activitats nos dijeron que en el número 55 de la avenida Jaume I no había ninguna inmobiliaria, sino que estaba dado de alta un negocio de reformas».

Finalmente, la pareja se personó el pasado 23 de septiembre en los Mossos d’Esquadra para denunciar al dueño de la inmobiliaria por presunta estafa. Además, también presentaron una segunda denuncia por haberles facilitado un cheque de 1.500 euros que, cuando fueron a cobrar al banco se encontraron que estaba desactivado. «Los Mossos también nos enseñaron una foto de este hombre y nos dijeron que estaba en búsqueda y captura».

Además, este matrimonio afectado también asegura haber conocido más casos de personas que habrían sido estafadas por esta persona. «Nos dijeron que a un marroquí también le habían estafado 20.000 euros y en la oficina nos encontramos a una mujer latina que había dado 4.500 euros en una paga y señal y que tampoco había tenido el piso», sentencia Hamza.

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