Los Mossos d’Esquadra y la Guàrdia Urbana de Reus detuvieron, este pasado viernes día 23 de octubre, a tres hombres en marco de una redada policial conjunta ejecutada en el barrio reusense Horts de Simó. La macrooperación fue apoyada por el Cuerpo Nacional de Policía, que participó con controles específicos de infracciones de la Ley de Extranjería, y con los efectivos del Àrea Regional de Recursos Operatius (ARRO) de la policía autonómica.
El operativo comenzó alrededor de las cinco y media de la tarde y se alargó durante varias horas. A las 18.50 horas del viernes se hizo la primera detención en la calle de Sant Joan. Se trata de un hombre de 22 años, de nacionalidad marroquí y vecino de Reus, acusado de ser el presunto autor de un robo con violencia. Los investigadores determinaron que el pasado día 7 de octubre, cuando circulaba encima de un patinete, susodicho detenido hizo caer al suelo una persona como consecuencia de una estribada para robarle uno cadena de oro del cuello y le causó varias lesiones. Este mismo sábado, el juzgado en funciones de guardia de Reus decretó su ingreso a prisión.
Los otros dos detenidos también son hombres. En este caso de 20 y 58 años, residentes en Vila-seca y Reus respectivamente. Ambos tenían una orden judicial de detención.
En el conjunto de la operación, se agasajaron siete actas por tenencia de drogas y dos más por posesión de armas prohibidas. También se denunciaron los titulares de 10 vehículos por falta de ITV o carencia de seguro. Dos de estos vehículos se inmovilizaron.
96 identificados
Durante esta actuación también se intervinieron billetes falsos y una persona quedó investigada por falsificación de moneda. En cuanto a incumplimientos en materia de las medidas restrictivas impuestas con motivo de la crisis sanitaria del coronavirus, se denunció a cuatro personas por no llevar mascarilla. Los agentes también pudieron recuperar dos patinetes que constaban como sustraídos. En total, entre los tres cuerpos policiales se identificaron 96 personas.
Según apuntan los cuerpos policiales, este tipo de operativos pretenden dar respuesta a la inquietud de vecinos y comerciantes de la zona en cuanto a actos incívicos y delictivos y hacer aumentar la sensación de seguridad.
La última operación conjunta entre la policía autonómica y local fue la semana pasada, cuando se desmanteló un punto de venta de droga en el barrio Muralla, que comportó la detención dos personas.
