Reus aún cuenta con cableado eléctrico y de telecomunicaciones aéreo, incluso en algunos casos con líneas colgando a poca altura e instalaciones antiguas en mal estado. Se trata de una queja vecinal repetida, recogida en varias ocasiones por este mismo medio e incluso propuesta en plenos de mandatos anteriores por varios grupos municipales. Esta misma causa fue llevada ayer por Junts per Reus al pleno municipal en forma de moción. Fue aprobada por unanimidad, aunque con una enmienda de gobierno, aceptada por el grupo proponente. En este caso, el concejal Daniel Marcos, en representación del equipo de gobierno, leyó la enmienda y destacó que habría un «calendario progresivo» para eliminar cableado, un «estudio de viabilidad técnica y económica» para hacerlo y que todo se trasladaría a las empresas y entes competentes para poner fin a la demanda vecinal. Más tarde, Marcos recordaría que, en el Pla d’Acció Municipal, también figura soterrar el cableado.
«El soterramiento de estas líneas sigue siendo una asignatura pendiente en muchos lugares y en Reus aún se pueden ver muchas colgando de palos o fachadas. A menudo, están mal colocadas y en mal estado. Suponen un peligro para los vecinos», destacó el concejal de Junts per Reus, Joan Carles Gavaldà, al leer la moción.
Iniciado el debate, hubo intervenciones en las que se aludió al tiempo que se tardaría en soterrar las líneas que quedan. Fue el caso de la del concejal no adscrito, José Ruiz, en la que describió la moción como «interesante», pero que el proceso sería «lento» Soterrar las líneas sería, en todo caso, «lo más seguro». A modo de repaso, y según datos disponibles detallados por Endesa y recordados por el Diari en mayo de 2023, Reus en 2021 contaba aún con una veintena de calles con postes y palomillas.
Otra de las aportaciones se relacionó con cuestiones de salud. La portavoz de la CUP, Mònica Pàmies, recordó que «además de una cuestión estética, también es de salud» y recordó que aún se han de soterrar las torres de muy alta tensión de El Pinar. En su turno de palabra, el portavoz de Vox, Julio Pardo, también expuso que los barrios de la periferia están «más abandonados que los del centro, esa es una tendencia». Sebastià Domènech (PP) tiró de archivo: «Hay grupos que en oposición llevaron esto mismo al pleno y al gobernar no hicieron nada».
El pleno municipal aprobó ayer conceder una Menció Honorífica Municipal a título póstumo a la arqueóloga y museóloga Lluïsa Vilaseca Borràs, en reconocimiento a su trayectoria personal. Fue referente de la arqueología reusense, testimonio excepcional de la creación y evolución museística de la ciudad y directora del Museu de Reus (1950-1954 y 1975-1984). En el último período, organizó el traslado del contenido del Museu que se encontraba en la Casa Rull, en el emplazamiento actual, en el arrabal de Santa Anna.
