Una nueva red de lavabos públicos, abiertos a la ciudadanía, se implantará en Reus este mandato. El concepto aparece en el Pla d’Acció Municipal (PAM) 2023-2027, la hoja de ruta del ejecutivo local para los próximos cuatro años. Y resultó ganador, paralelamente, en la última convocatoria de los Pressupostos Participatius, la que se llevó a cabo en 2022.
El concejal de Via Pública, Daniel Marcos, explica que la de los baños públicos «es una de aquellas cuestiones que, a nivel de gobierno, tenemos muy claro que debe existir».
La red es necesaria y ha resultado insistentemente reclamada a lo largo de los últimos años desde varios ámbitos. Buena parte de los partidos políticos con representación en el consistorio han llevado su creación alguna vez al pleno o han planteado iniciativas similares. Y, a la vez, los propios vecinos pedían alternativas gratuitas, más allá de la opción de acceder a establecimientos privados, habitualmente pagando, para usar el servicio. Lo que hay disponible ahora son los lavabos de los edificios municipales, dentro de su horario de apertura.
Marcos recuerda también que, «de alguna manera, y aunque no es lo que buscamos, la ciudad ya cuenta con una red de lavabos públicos en el sentido de que, por ejemplo, todos los aparcamientos municipales disponen de aseos».
«Además», añade el edil, «estos están adheridos a la iniciativa No puc esperar, para aquellas personas que tienen algún problema digestivo o de otro tipo y que necesitan utilizarlos de forma urgente». «Así se muestra en los accesos de cualquier parking, con pequeña cartelería que lo indica», añade el concejal. Para emplear estos baños hay que llamar a un timbre y el operario desbloquea las puertas.
«Tal vez no todo el mundo lo sepa, pero están disponibles», indica Marcos. En cualquier caso, el responsable de Via Pública precisa que, con el nuevo proyecto, «está claro que debemos ir más allá de eso».
Habrá que afinar, primero, qué concejalía lidera el despliegue. «Si acaba siendo Via Pública, lo trabajaremos y lo tendremos», afirma el edil. Y es que «somos los primeros que también tenemos la problemática del impacto en la limpieza viaria y en cuestiones de incivismo que se generan».
«La red de lavabos públicos está recogida en el PAM y, dentro de estos cuatro años, esperamos tenerla. Veremos desde qué área se materializa», concluye. Las ubicaciones y el formato aún han de concretarse.
Con el voto de hasta 250 vecinos
Desde la vertiente de los Pressupostos Participatius, en la convocatoria de 2022 pasó como ganadora una iniciativa de este mismo campo. La propuesta, tal como recibió luz verde, se planteaba para «dotar la ciudad de lavabos públicos gratuitos y adaptados a personas mayores». Y era una compilación de ideas formuladas por Salvador Martí Güell, Josefa Martínez Morcillo, Jaume Balañà Cabré y Maria Lluïsa López Portero.
Recibió el apoyo de 250 vecinos y eso le sirvió para superar el corte y obtener fondos para desarrollarse hasta un tope de 150.000 euros, dentro del capítulo de grandes proyectos.
Consultada sobre el encaje de todo ello, la concejala de Participació, Montserrat Flores, confirma que «existe el compromiso hacia las personas que hicieron la propuesta, que se evaluó en una cantidad determinada».
En el mismo sentido, detalla que «seguramente con aquello no se puede hacer una red tan amplia como querríamos», por lo que la parte de los Pressupostos Participatius de 2022 y la del PAM deberían acabar probablemente complementándose y perfilarse de manera conjunta.
La coincidencia «significa que el Ayuntamiento ha escuchado lo que la ciudadanía planteaba», defiende Flores, que precisa que «los Pressupostos Participatius no sirven solo para ejecutar propuestas» sino que «ponen necesidades encima de la mesa. Y eso es un gran valor que se debe tener en cuenta».
La concejala de Participació lanza el ejemplo de los tableros de ajedrez en la calle. «Hubo una propuesta en el marco de los Pressupostos y, hace poco, se puso uno en el suelo de la calle Salvador Espriu. Y una cosa no invalida la otra».
