Las grandes cifras del proyecto hablan de la compra de un terreno de 175.000 metros cuadrados en el sector H12-Mas Sunyer de Reus para construir una nave logística de 111.250 metros cuadrados, superficie equivalente a 15 campos de fútbol. El inversor es la sociedad P3 Logistic Parks y los vendedores son propietarios privados y el Ayuntamiento, como titular de los viales y de una parte de la parcela. No se ha hecho público el montante de la operación, uno de cuyos aspectos más llamativos es que el propietario último del solar pasa a ser el gobierno de Singapur.
Vamos por partes. El polígono Mas Sunyer está ubicado entre las autovías de Bellissens y A-7 y la autopista AP-7 –en la encrucijada de los términos municipales de Reus, Vila-seca y la Canonja– y el macroproyecto logístico que va a acoger es el mayor que actualmente se desarrolla en Catalunya. Se prevé iniciar las obras a mediados de 2024 y finalizarlas un año después.
P3 Logistic Parks es uno de mayores promotores europeos de almacenes logísticos. Con sede en Praga, hoy está presente en doce países, en los que desarrolla y gestiona activos inmobiliarios. Sus inversiones en España la han convertido en uno de los principales operadores del sector y entre sus inquilinos están firmas como El Corte Inglés, Amazon, Seur, Correos, Airbus, DHL o Montfrisa.
La GIC
Nacida en 2001 en la República Checa, el gran salto adelante de la compañía se produjo en 2016 al ser adquirida por la Government of Singapore Investment Corporation (GIC), el fondo soberano que gestiona los activos financieros del gobierno de Singapur. Con el músculo inversor de GIC, P3 inició una rápida y fuerte expansión mediante la compra de activos y carteras logísticas por Europa, especialmente en Alemania y España.
¿Y qué hace un fondo soberano? GIC invierte a largo plazo las reservas de la República de Singapur con el objetivo de preservar y aumentar los ingresos para el presupuesto nacional y proporcionar recursos adicionales para el gasto público. El país isleño del sur de la península de Malaca es uno de los más pequeños y más ricos del planeta y GIC es una de las piezas clave para asegurar su futuro financiero. Así, el de Singapur es el cuarto mayor fondo soberano del mundo –tras los de Noruega, China y Abu Dabi–, con un patrimonio valorado en unos 800.000 millones de dólares. Sus activos están diversificados en todo tipo de mercados a lo largo de los cinco continentes y P3 Logistic Parks es su brazo inversor en el sector de la inmologística.
Aparte del impacto económico de la construcción y posterior implantación de empresas, la operación consolidará al polígono Mas Sunyer como una plataforma de referencia para la actividad logística. De hecho, Amazon había proyectado en el mismo sector un gran centro de almacenaje y distribución, aunque finalmente lo descartó a raíz de los recortes por la desaceleración de su negocio tras la pandemia.
Aunque el proyecto de Amazon quedó en nada, el trasfondo del asunto representó una noticia esperanzadora para el futuro del sector H12, porque el gigante del comercio electrónico buscaba un emplazamiento junto a un nudo de comunicaciones que facilitase su operativa de transporte por carretera y con terreno suficiente para acoger uno de sus principales centros logísticos. Las dos opciones que barajaba la multinacional norteamericana eran Mas Sunyer y unos terrenos situados en otro enclave muy bien comunicado y con polígonos industriales muy desarrollados en una comarca vecina. Que Amazon se hubiese decantado por Reus dejaba claro el potencial de la citada ubicación, ahora confirmado con el aterrizaje de P3.
Mas allá del apunte exótico de la conexión asiática, la presencia del fondo soberano de Singapur aporta una solidez financiera enorme a la operación anunciada esta semana por P3 y el Ayuntamiento de Reus. Esta no es una cuestión menor, porque la titularidad de las empresas promotoras y sus variaciones ha propiciado algún serio disgusto al consistorio en los últimos tiempos.
Metrovacesa y el vía crucis del centro comercial del Parc de Sant Jordi ya queda lejos, pero recientemente la construcción del Centre Aquàtic i de Fitness acabó en fiasco por los cambios en la adjudicataria. El Ayuntamiento había negociado con Duet Spa & Sports –dedicada a la explotación de complejos deportivos municipales en régimen de concesión– el proyecto anexo al Pavelló Olímpic. Durante el proceso, el fondo de inversión estadounidense Sixth Street Partners compró Duet Spa & Sports a sus fundadores. Los nuevos gestores mantuvieron el compromiso, presentaron la oferta y se adjudicaron la licitación, pero quisieron firmar el contrato mediante una sociedad interpuesta carente de las garantías y la solvencia exigidas en el pliego de condiciones. Un planteamiento inasumible que obligó al consistorio a abortar la concesión, con lo que el Centre Aquàtic se fue al garete.
En esta ocasión, la pertenencia de P3 al fondo soberano de Singapur aleja cualquier duda, al menos sobre su crédito.