Cansancio. Esto es lo que sienten los vecinos del barrio Gaudí de Reus respecto el puente de Adif que conecta esta zona de la ciudad con el centro, a través de la avenida Països Catalans. Después del nuevo incidente que se produjo el jueves pasado, en el que hubo un desprendimiento en este paso que transcurre por debajo de las vías del tren, los vecinos ya no saben qué hacer para que se haga una reforma integral y definitiva en esta infraestructura, que cada vez suma más incidentes.
«Estamos cansados de enviar cartas al Ayuntamiento, a la Subdelegación del Gobierno... y que todo el mundo diga ‘sí’ y después no se haga nada y se deje pasar el tiempo», critica contundentemente la presidenta de la Associació de Veïns Barri Gaudí, Maria del Mar Escoda. El pasado 30 de mayo cayeron trozos de cemento en la calzada y en un carril, sin producir heridos, «pero podría haber hecho daño», recalca Escoda, que se muestra crítica con la situación y reivindica «que se trabaje, de una vez, por la ciudad».
En la misma línea se manifiestan otros vecinos del barrio Gaudí, como es el caso de Jose Francisco Arias, que considera que las distintas instituciones se pasan la pelota unas a otras. «Antes pasaba por debajo de este puente a diario para ir a trabajar y, en una ocasión, me cayó justo delante un bloque de hormigón. Esto sucedió hace 30 años y aquí nunca se ha hecho una reparación integral», explica Arias. Dice que, en ese momento, intentó reclamar una reparación, «pero entre Ayuntamiento, Renfe y el Ministerio, se pasaron la pelota», reitera.
El puente está muy transitado por vehículos y también viandantes que quieren acercarse al centro de Reus. Y es que se trata de la principal entrada al barrio Gaudí, lo que hace aumentar la preocupación de los vecinos. «Pasa muchísima gente por aquí», recuerda Eduard Molina, mientras que otra vecina, Patricia Dias, subraya que hace falta una mejora urgente. «Estos problemas no son de ahora», dice Dias, que señala una de las principales problemáticas que tiene el puente: «Cuando llueve, todo se llena de agua. Las paredes son como cataratas». Josefina Hernández vive en el barrio Gaudí. Pasa a diario por este puente para dirigirse al centro y también destaca las filtraciones como uno de los principales problemas de esta infraestructura. Considera que no se han escuchado las reiteradas reivindicaciones que los vecinos han hecho para que se reforme, definitivamente, el puente. «No nos escuchan», dice Hernández, que señala que la competencia es de Adif,
Un proyecto para la reforma
El año pasado, el Ayuntamiento de Reus anunció que se había encargado un estudio de rehabilitación para modificar aspectos estructurales del puente que une el barrio Gaudí con la avenida Països Catalans. Una medida que se tomaba después de las innumerables críticas por parte de vecinos de esta zona de Reus, que hace años que se quejan de las constantes inundaciones del puente, la mala iluminación y la inseguridad. En este estudio se contempla la ampliación de las aceras, la ampliación de la iluminación y la mejora de su estructura base para acabar con las filtraciones de agua cuando llueve, lo que daña y debilita el puente. «Pero no se sabe nada en firme», señala la presidenta de la Associació de Veïns Barri Gaudí, Maria del Mar Escoda, quien destaca que «no hay ninguna licitación, así que, de momento, todo seguirá igual».
La presidenta de la asociación vecinal también pone el foco en el proyecto que, en los próximos meses, permitirá mejorar y poner en valor el paseo de la Boca de la Mina. «La gente tiene que llegar de alguna forma al paseo... A ver si después de esta gran intervención, se dan cuenta de lo necesario que es la reforma del puente, que es el principal punto de conexión entre el barrio y la ciudad», añade. Escoda recuerda que en alguna ocasión se han hecho intervenciones en este paso, «pero siempre ha sido muy esporádico y los incidentes siguen».