El arte urbano aterriza en los patios de las escuelas de Reus. Una nueva edición de Pintades Horitzontals ha dejado huella en dos colegios de la ciudad: pero no solo por los colores que lucirán las pistas de futbol y baloncesto. Esta iniciativa se convierte, también, en una oportunidad para que los alumnos conozcan más sobre el arte, los distintos estilos que existen y, en especial, el arte urbano.
Pintades Horitzontals es una iniciativa impulsada por las concejalías de Joventut y Educació i Ciutadania, y da una oportunidad a diferentes artistas jóvenes que han presentado sus propuestas en un concurso. Los pintores elegidos dejan su firma, estilo y obra en una pista de escuela de la ciudad. En apariencia, uno de los objetivos es borrar el gris del hormigón que domina en la mayoría de los patios, pero el proyecto va más allá de la decoración.
Arte urbano en clase
«Ahora conozco a Joan Miró y a Noé Peiró». Se lo dijo un alumno del colegio Sant Bernat Calvó a Noé, que es el artista muralista que ha pintado el patio de la escuela. En clase, los niños han conocido el estilo del pintor, su historia, sus obras e, incluso, las han intentado imitar. Así, Noé Peiró se ha convertido en un referente más de los alumnos.
La lluvia, que cayó por momentos la semana pasada, provocó que el artista tuviese que parar de pintar a ratos, pero no se marchó del colegio, fue a las clases a hablar con los niños y a resolver sus dudas. «¿Cuándo empezaste a pintar?», «¿y cuánto tardarás?», «¿cómo lo haces?», «¿nos dibujas este camión?», recuerda el pintor que le preguntaron algunos alumnos. Así, el arte urbano no solo se ha quedado en el patio, también ha entrado en las clases.
Pintar una pista de escuela es como hacerlo en una fachada de un edificio de 13 plantas
En el colegio Sant Bernat Calvó celebran la llegada de la iniciativa a su centro. «El arte es el gran olvidado del currículum escolar, pero es importantísimo para el desarrollo de los niños. Pintades Horitzontals no debe quedar en una anécdota y tenemos que incorporarlo en las clases», apunta el director del colegio, Pep Montané.
Color d’igualtat es el nombre de la obra de Noé Peiró que representa un grupo de alumnos y alumnas jugando a fútbol. «Un dibujo irónico», según el artista, porque en esta escuela del barrio Juroca no se juega a futbol durante el recreo, puesto que desde la dirección del centro promueven los juegos tradicionales.
La pintada la empezó el lunes 16 de octubre y tenía que acabar el viernes, pero la lluvia se lo puso difícil, y ha tenido que alargar su estancia. «Llego a las ocho de la mañana y me voy doce horas más tarde», explica Noé, que es la primera vez que ha pintado una obra en formato horizontal y no vertical. «Es todo un esfuerzo. Por la noche, el contador de pasos que tengo revienta. Hago una media de 35.000 pasos pegando vueltas en el patio», detalla el artista. Si la superficie pintada de la pista fuese vertical, sería como pintar una fachada de un edificio de 13 plantas.
‘Koi i la perseverança’
Esta edición de Pintades Horitzontals ha llegado a otro centro de Reus. La pista del Cèlia Artiga ha sido el lienzo de la artista local Chenxin Tang, que ha pintado Koi i la perseverança. Ambos creadores han ganado 1.000 euros y el consistorio ha sufragado todos los gastos de su intervención.
Los artistas ganadores han presentado sus obras, con total libertado, la única norma es que «el contenido no atente contra la dignidad de las personas». Una oportunidad que los artistas agradecen: «Ha sido muy cómodo, en el colegio lo han puesto muy fácil. Y yo no he cambiado mi estilo para pintar en el patio de un centro educativo; la dirección lo ha aceptado», celebra Noé Peiró, que durante una semana se ha convertido en un miembro más de la comunidad educativa.