Aigüesverds existe. Con este toque de sátira, en honor a la mítica reivindicación Teruel Existe, los vecinos de la urbanización de Les Palmeres, situada a medio camino de la carretera de Cambrils, quieren poner sobre la mesa que se sienten ignorados por el Ayuntamiento de Reus. Dan varios motivos, pero el principal es que son el único barrio de la ciudad que no tiene una línea de autobús municipal. Una petición que, desde los representantes de la asociación de vecinos, es reiterada y cada vez más popular entre los 1.300 habitantes de la urbanización.
«No entendemos porque no nos tratan igual que a otras zonas alejadas del núcleo, como la urbanización el Pinar o el barrio Montserrat», transmite Marcos Massó, presidente de la asociación de vecinos. «Simplemente queremos tener lo mismo que tienen los demás», añade. Y es que la creación de una línea de autobús es una reivindicación con 20 años de antigüedad, la misma que hace que se creó la urbanización. «La gente mayor, los jóvenes y aquellos que no pueden conducir no tienen opción para llegar hasta aquí», critican los vecinos. Destacan que «pagamos los mismos impuestos que todos los ciudadanos de Reus, pero no tenemos los mismos servicios». «No estamos hablando de caprichos, sino de servicios mínimos», remarcan.
Desde la asociación vecinal aseguran que a lo largo de estos años se han reunido varias veces con el Ayuntamiento y que incluso han planteado alternativas para agrupar la posible línea de Aigüesverds con una que pase por Misericordia, el Tenis Monterols y la urbanización Blancafort. «Nos dicen que no les saldría rentable, pero nosotros consideramos que las líneas públicas no tienen por qué serlo». Incluso han formulado una propuesta para que el autobús tenga una frecuencia mínima: dos veces por la mañana y por la tarde. Sin embargo, aseguran que la negativa ha sido constante.
Reus Transport
Por su parte, Marina Berasategui, concejal de Urbanismo y Movilidad asegura que «con las características del servicio actual no es posible llegar hasta la zona de Aigüesverds», Sin embargo afirma que desde el consistorio y Reus Transport «somos conscientes de la demanda de los vecinos y tan pronto como sea posible ampliar el servicio, estudiaremos de nuevo llegar hasta la urbanización».
Entre los vecinos de Aigüesverds, la sensación es de estar «abandonados por el simple hecho de estar lejos del centro». Este es el primer año que tienen una luz de navidad en la entrada y aseguran que tuvieron que picar mucha piedra para lograr que en la urbanización se instalaran elementos para el parque infantil.
Otra de las reclamaciones que persiguen desde la supracomunidad Les Palmeres de Aigüesverds es la de trabajar contra los malos olores de los desagües – reclamación que se remonta al 2002–; tener un mantenimiento periódico de las aceras; mejorar la limpieza vial de las calles; y aumentar la frecuencia de la recogida de basura.
Sistema de bus a demanda
El año 2013, Reus Transport inició el servicio bus a demanda como un plan piloto para una solución de movilidad a la urbanización Mas Carpa. Este pasó a extenderse a las paradas de l’Escola Oficial d’Idiomes y la Escola Alba, con las líneas 30 y 31 que conectan el centro con el Institut Pere Mata. La iniciativa permitió ampliar considerablemente la frecuencia de paso del autobús en esa zona. Durante el año 2017, este servicio se optimizó, con más de 6.000 solicitudes y en 2018 se amplió hasta la urbanización Sant Joan, conectando el servicio con la línea 50. En estos dos casos, el sistema se basa en incorporar nuevas paradas en líneas regulares.
El bus a demanda prevé que el usuario avise desde la parada. Así los vecinos que se quieren desplazar tan solo tienen que pulsar el botón para avisar 10 minutos antes de la hora de paso prevista e indicar en la parada para que el bus se pare. Si se coge el autobús del centro de la ciudad hay que avisar al conductor para que modifique el circuito.