En la actualidad, el uso de los dispositivos móviles ha cambiado la percepción de la gente de ver el mundo y de actuar. Anteriormente, era necesario desplazarse a los sitios públicos, como, por ejemplo, para comer una hamburguesa en un restaurante o comprarnos ropa. Hoy en día, podemos disfrutar de todo esto en cualquier momento y en cualquier lugar teniendo a nuestra mano las plataformas digitales como los smartphones o las tablets.
Actividades como, por ejemplo, jugar en casinos se pueden disfrutar hoy día en plataformas digitales, lo que las hace mucho más atractivas y accesibles. Es por ello que, en los últimos años, las webs de juegos de azar y apuestas han experimentado un gran crecimiento en nuestro país, dando lugar a una industria en la que cada vez participan más personas.
La popularidad que están experimentando dichas webs provoca que, entre los usuarios que las utilizan, haya cada vez más mujeres que disfrutan de estos juegos. Además, el perfil del jugador ha cambiado en los últimos tiempos, existiendo más jugadores con un promedio de edad entre los 25 y los 35 años.
Es un hecho, que con la aparición de estas webs de juegos y apuestas, la ludopatía está cada vez más presente entre los jóvenes que lo practican. Esta es una enfermedad reconocida por la Organización Mundial de la Salud que lleva a los usuarios a conductas compulsivas tanto en apuestas deportivas, como videojuegos o juegos de azar. Dicha enfermedad tiene consecuencias emocionales tanto para la persona afectada, como para su entorno.
Como se explica aquí, los casinos online en España necesitan ser regulados por las leyes a través de La Dirección General de Ordenación del Juego (LDGOJ), órgano que pertenece al Ministerio de Hacienda y que se ocupa de autorizar, supervisar y controlar los juegos a nivel estatal.
El gobierno ha querido dar solución a este problema con la modificación de la Ley 13/2011 de Regulación del Juego existente en España. Ya se ha establecido un Plan Nacional de Drogas en nuestro país a través del cual las autoridades españolas luchan contra la adicción al juego online.
Azucena Martí, delegada del Gobierno del Plan Nacional sobre Drogas, ha indicado en la Comisión Mixta Congreso-Senado de España que, además de incluir el juego online y las apuestas deportivas, se pretende abordar el uso compulsivo de internet.
La adicción al juego que está teniendo lugar en la actualidad puede ser comparada con la adicción a las drogas que se vivía en los años 70 u 80. Jugadores compulsivos que no saben controlar su adicción y son capaces de endeudar a sus familias hasta perder su casa, e incluso a sus parejas e hijos, llegando a casos extremos en los que llegan a límites como el suicidio.
Los trabajadores de salas de juegos y apuestas confirman que han vivido la experiencia de ver a clientes que se pasaban horas y horas sin comer ni descansar, tomando solo café y gastándose el sueldo del mes en 24 horas. Finalmente, se ven sobrepasados por el arrepentimiento y la desesperación al no poder controlar ese instinto que los obliga a intentar, de forma compulsiva, ganar unas cuantas monedas.
Según Vicente Arrollo, de la Asociación por la Prevención y Ayuda al Ludópata, ha aumentado el número de afectados que van a su centro a pedir ayuda para curarse de esta enfermedad. Debido a que el adicto al juego siempre busca las sensaciones y emociones que el juego aporta, este siempre evita acercarse a lugares que le tienten a jugar.
Los juegos de apuestas online o videojuegos están al alcance de todas las personas a través de sus smartphones, convirtiendo estos dispositivos en objetos que los usuarios no pueden dejar de utilizar, lo que da lugar a procesos muy similares a los que causan las drogas en el ser humano.
Las adicciones a las nuevas tecnologías dan lugar a conductas que provocan en los más jóvenes problemas de ansiedad y baja autoestima. Por ello, los expertos quieren trabajar en la prevención de estas adicciones, detectándolas a tiempo y explicando que estas conductas no se solucionan retirando los dispositivos que se utilizan, si no mediante la intervención en el trastorno que causa la situación.
Es por esto que es aconsejable acudir a los especialistas, en este caso, los psicólogos. Ellos pueden ayudar a prevenir estos trastornos de una manera profesional, poniendo los límites al uso de las nuevas tecnologías, que son utilizadas cada vez a más temprana edad.