La forma en la que nos mostramos en internet, así como los perfiles en nuestras redes sociales son la principal carta de presentación que tenemos hoy en día. Por esta razón, las grandes empresas invierten grandes cifras en la contratación de una agencia de marketing digital que gestione los contenidos y la forma de comunicación de cara al resto del mundo. La realidad es que, si no estás en las redes, no existes. Y una empresa que no existe es un fracaso a todos los niveles.
Contratar una agencia de marketing digital
Con el desarrollo de internet y la aparición de la web 2.0, las grandes empresas se dieron cuenta de la necesidad de cuidar su forma de aparecer en las redes. La web dejó de ser una plataforma de información para convertirse en una comunidad de gente inabarcable.
Tener un buen perfil en las redes sociales, mantener el contacto con los clientes mediante el correo electrónico, gestionar la página web o contar con un posicionamiento SEO de calidad son las principales tareas con las que una agencia de marketing digital trabaja a diario.
Por ello, contratar a un equipo de profesionales de alto nivel como puede ser el ejemplo de Jezz media, es un requisito por parte de las empresas. Cuánto mayor sea la inversión en este proceso, mayor será la recompensa a obtener.
Antes de ponerse por cuenta propia a hacer este tipo de trabajo, merece la pena pararse unos minutos a pensar. Existen personas que dedican años y años de estudios para especializarse en este campo, por lo que sin duda alguna la profesionalidad ejercida por estos expertos será de alto nivel. Una comparación imposible con respecto a hacerlo por cuenta propia.
Instagram, la red que más crece
Cuando Facebook llegó a nuestras vidas, todo cambió por completo. El mundo estaba más conectado que nunca y, sin importar la edad, la gente se lanzó a abrirse un perfil en esta red social. Las marcas vieron una oportunidad, por lo que crearon también sus propios perfiles. Permitiendo que los usuarios se convirtieran en seguidores y disfrutarán a diario de su contenido.
Pero, con el paso del tiempo, Instagram fue ganando la partida a Facebook. Es la red social con mayor seguimiento y hay personas que se ganan la vida exclusivamente compartiendo contenido con sus seguidores: los instagramers.
Así pues, que una empresa tenga un perfil de calidad en esta plataforma es un requisito indispensable. Tener una buena presencia puede ser mucho más sencillo, gracias a que se pueden comprar likes para Instagram o, incluso, seguidores. De esta forma, la estética y los valores de la marca se verán altamente recompensados.
Este beneficio que ofrecen las nuevas plataformas, puede dotar a una empresa en particular de cierto nivel propio. Es decir, todos queremos seguir a aquellas marcas que son tendencia, lo que significa que necesitas una base de seguidores e interacción en las publicaciones lo suficientemente grande como para generar cierta confianza en el usuario medio. No hay que empezar de cero y esto es una ventaja.
Porque no hay duda de que, si gustas en Instagram, gustas a todo el mundo.
Tener una página web de calidad
Esto es algo que muchas empresas dejan de lado más de lo que deberían. Pero la importancia del diseño de páginas web es una realidad imperativa. La usabilidad y el buen manejo de ellas, definirán que un cliente quede satisfecho con la compañía en particular.
No hay nada que exaspere más a los usuarios que los tiempos de carga infinitos o la complejidad en el entendimiento de una página web. La sociedad contemporánea es cada vez más impaciente y no le gusta perder el tiempo en el mundo del 4G.
Por ello, volviendo a la importancia de contratar una agencia de marketing digital de nivel, el hecho de diseñar la página web de una manera profesional puede abrir muchas puertas mercantiles.
Pero no solo tiene que ser usable. Internet es un mundo de competencia ilimitada, con un abanico de posibilidades y ofertas que no tiene comparación a lo largo de la historia. Tener un buen diseñador, con un buen gusto estético y que sepa compartir los valores de marca, supondrá un avance propio del siglo en el que vivimos.
Mantenerse actualizado es una obligación por parte de las empresas hoy en día y la herramienta para ello es el marketing digital.