El Baix Penedès, esa comarca del norte de Tarragona pero que mira enamorada a Barcelona, es la comarca peor tratada de Cataluña con diferencia, y para comprobarlo sólo tenemos que mirar unos pocos datos. Es la comarca con más paro desde hace años y además con una renta per cápita media que ronda los 12.000 euros anuales, la más baja de nuestra Comunidad, y con muchas familias vulnerables y en riesgo de exclusión social. Últimamente nos llegan noticias de cierre de empresas históricas como Saint Gobain o Robert Bosch, que confirman una desindustrialización galopante de toda la zona, que todavía se estaba reponiendo de la crisis del ladrillo del 2008. Tarragona es la provincia con peor presupuesto, y el Baix Penedés es la comarca de Tarragona que sale peor parada. Este 2020 nos toca a menos de 20 euros por cabeza al año en inversiones, ni punto de comparación con comarcas que llegan a recibir más de 1.000 euros por habitante.
Pero, ¿qué le pasa en realidad al Baix Penedès? Ya tenemos diagnósticos impecables de la comarca, y todos coincidimos en eso. Una primera dificultad es la gran población flotante no empadronada, y no me refiero a la población turística de verano, hablo de un volumen enorme de segundas residencias que provoca que muchos servicios se vean desbordados. Unos recursos y servicios totalmente insuficientes para esa demanda real superior a la prevista. Menos bomberos, menos maestros, menos mossos… y menos presupuesto. Y otra gran dificultad es la paradoja de estar cruzada por grandes infraestructuras viarias que no están pensadas para facilitar la movilidad y un urbanismo disperso que dificulta la oferta equitativa de servicios públicos. Pero todos estos males no vienen del cielo, las bajas inversiones durante años es una falta de interés reiterada por parte de los diferentes gobiernos de la Generalitat, incluido el actual.
Vendrá el gobierno de turno con que no hay recursos para abrir el CAP de Cunit por la tarde, mejorar el Hospital del Vendrell o hacer gratuita la C-32¿Y por qué se habla tanto últimamente del Baix Penedès? Desde Ciutadans llevamos años hablando de que el Baix Penedès necesita esto o aquello, el Logis del Penedès, potenciar Idiada, mejorar la asistencia sanitaria… Mientras otros grupos parlamentarios planteaban otras acciones, unas coincidentes y otras no. Pero está claro que lo que necesitamos es un plan estratégico consensuado entre todos, que nos permita priorizar acciones y, sobretodo, no perder oportunidades mientras discutimos entre nosotros. Los problemas del Baix Penedès los arrastramos desde hace décadas y las soluciones deben ser estructurales, de peso y consensuadas.
A pesar de que ahora hablamos de una Taula del Baix Penedès, vendrá el gobierno de turno con que no hay recursos para abrir el CAP de Cunit por la tarde, mejorar el Hospital del Vendrell o para hacer gratuita la C-32.
Pero yo sé de dónde pueden coger los primeros 150.000 € anuales: de los sueldos del Delegado del Govern en el Penedès y su responsable de oficina, cargos sin funciones reales y que son prácticamente decorativos. Los recursos son limitados, pero el Baix Penedès se merece prioridad. Como Teruel, ¡El Baix Penedès existe!de volver a empezar.