Después del arranque espectacular protagonizado por la pirotecnia gallega Josman, este jueves en la segunda noche del Concurs Internacional de Focs de Tarragona fue el turno de la pirotecnia leonesa Pibierzo.
A pesar de ser la primera vez que actuaban en el concurso, lo cierto es que su debut fue más que bueno. En ese sentido, es cierto que la experiencia adquirida a raíz de haber participado en otros concursos, les ayudó. Y es que anteriormente los leoneses ya habían participado en varias ediciones del Concurso de Mascletás de las Fiestas de la Magdalena (Castellón de la Plana). Además, son un habitual del concurso internacional de pirotecnias de Valladolid y de la muestra internacional que se realiza en Burgos. Durante varias ediciones, han llevado a cabo su espectáculo en las Fallas, las fiestas de Logroño y las de Donostia.
La buena temperatura hizo una vez más que fueran muchas las personas que decidieran cenar en la playa. Había quienes repetían y después de ver el gran nivel con el que había empezado el concurso, ahora tenían curiosidad para ver cuáles eran las apuestas de los otros participantes.
Si un jueves de julio, la Part Alta de Tarragona ya está concurrida, estos días con los fuegos todavía lo está más. Tal y como paso el miércoles, el Passeig de Sant Antoni y las escaleras de la Diputación volvieron a llenarse de curiosos y curiosas. «Antes bajábamos a la playa, pero el año pasado decidimos probar de ver los fuegos desde aquí y la verdad es que nos sorprendió porque se ve a la perfección», comentaba Maite Álvarez. A poco a poco, las luces de la ciudad se apagaron: la ciudad estaba lista para vivir una nueva noche del Concurs de Focs.
El primer aviso ponía a todo el mundo en alerta y a las 22:30 h, puntuales, empezaba el espectáculo. Las palmeras y los fuegos en el agua fueron los grandes protagonistas durante los quince minutos que duró. A diferencia del primer día, esta vez los colores predominantes fueron el verde, el rojo y el lila. En cambio, los gallegos apostaron más por el cobrizo y el amarillo.
El sonido y las luces estuvieron perfectamente sincronizados y el final no decepcionó a nadie. Hubo en algún momento que el humo dificultó poder ver con claridad algunos fuegos, sobre todo los de menor altura, pero esto no supuso un problema, ya que rápidamente este desaparecía. Desde la playa se podían ver todas las luces encendidas de las habitaciones del hotel H10 Imperial Tarraco. Nadie se lo quería perder y por eso también la terraza estaba llena.
Esta noche será el turno de la pirotecnia Poleggi. La italiana será la primera compañía extranjera de la edición. Estos ya conocen de primera mano en qué consiste el Concurs Internacional de Focs de Tarragona, ya que en 2018 se proclamaron campeones, obteniendo una puntuación superior a dos pirotecnias valencianas “muy apreciadas” en la ciudad, como son la Pirotecnia Mediterráneo y la Pirotecnia Tomàs. La empresa Poleggi se caracteriza por combinar la fabricación de los tradicionales y “altamente” valorados efectos pirotécnicos italianos con la incorporación de los efectos “más modernos e innovadores”.
Por último, el sábado será el turno de la francesa Ciels en Fete. La compañía está reconocida internacionalmente por su “excelencia” y viene a demostrarlo. Finalmente, el domingo se dará a conocer el ganador de esta edición.