Un hogar donde sentirse como en una familia

Llar Natalis.  Durante los últimos tres años, cerca de cuarenta mujeres en riesgo de exclusión social han recibido la ayuda de la Llar durante los meses de maternidad

12 diciembre 2020 19:20 | Actualizado a 13 diciembre 2020 06:42
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El tradicional árbol de Navidad ha sido la principal figura solidaria que han elaborado los voluntarios que colaboran con Llar Natalis. Este año, los pedidos han sobrepasado cualquiera de las previsiones que tenían los miembros del proyecto. «Estamos tremendamente contentas por la respuesta de la ciudadanía, pero estamos hasta arriba de faena», dice sonriente Maria José Rueda, responsable del voluntariado.

El beneficio de estas figuras se destinarán para financiar el proyecto Llar Natalis, impulsado por la Fundació Obra Pia Montserrat, que tiene por objetivo acoger a madres embarazadas en riesgo de exclusión social.

De la mano de Carmen Cumplido, trabajadora social, y de la comunidad Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará se ofrecen una serie de servicios que van desde el alojamiento y manutención de las mujeres y sus hijos, hasta talleres de formación e inserción laboral. Todo ello, con la inestimable colaboración de unos quince voluntarios fijos que, en fechas puntuales, como las Navidades, pueden ascender hasta un centenar.

«No es una casa de acogida al uso, es como una familia», dice Maria Sophie, una de las hermanas de la comunidad. Explica que muchas de las mujeres que acuden a Llar Natalis son extranjeras que no tienen apoyo familiar en el país y que, por lo tanto, las amistades que hacen aquí son muy importantes. «Entre ellas se ayudan de muchas maneras y se crean unos vínculos de afecto muy potentes», reconoce Marie Sophie.

Uno de los momentos claves en el proceso que viven estas mujeres es el de la inserción laboral y la formación. Para ello, además de contar con la colaboración de empresas externas, hay docentes voluntarios que acuden a la Llar a impartir clases de lengua catalana y castellana. «Los talleres que se llevan a cabo a lo largo de la semana dependen de las necesidades que requiere cada grupo de mujeres. Hay veces que son prácticamente analfabetas», aclara Carmen Cumplido, quien explica que recientemente ellas mismas también han propuesto hacer talleres de primeros auxilios y de empoderamiento femenino.

Piden más financiación pública

Todas las mujeres que llegan a Llar Natalis lo hacen derivadas de los servicios sociales, centros hospitalarios o Cáritas parroquial. «A nivel humano la respuesta es magnífica por parte de los profesionales de los hospitales, pero, a nivel institucional, no tanto», reconoce Maria José Rueda, quien remarca la libertad de la cual gozan las mujeres, tanto de culto como de decisión sobre si continuar en Llar Natalis.

«Nos gustaría que el Ayuntamiento se involucrara más con el proyecto. Somos un servicio de ciudad», explica Carmen Cumplido, que asegura que las conversaciones que se mantienen con el Consell Comarcal para conseguir financiación van en la buena dirección.

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