El Àliga y la Aligueta de Tarragona ya lucen las nuevas palomas en sus picos. La entidad presentó ayer en los Jardins de la Casa de la Festa las renovadas figuras con este último retoque de Antoni Mas, el artista y herrero de Vila-seca que creó el elemento del Seguici Popular el 1986, y que supone la culminación de su obra. El Àliga tenía pensado este cambio de look desde hace ya un tiempo y lo querían dar a conocer el año pasado, para celebrar su participación en 35 fiestas de Santa Tecla, pero la pandemia no lo permitió y lo han hecho este 2021, cuando la figura cumple 35 años desde que fue recuperada por miembros del Ball de Diables de Tarragona.
El acto de presentación comenzó con las palabras del vocal de la entidad, Javier Muniaín, que explicó precisamente que hacía tiempo que desde la colla le daban vueltas a la opción de renovar las palomas. Cabe recordar que durante los primeros años, el Àliga salía con palomas de verdad, vivas, en el pico y al cabo de poco tiempo ya empezó a salir con palomas disecadas, hasta ahora. En este sentido, Muniaín celebró que Mas haya podido acabar y redondear su obra y señaló que las palomas, de hierro y acero, «tienen un color que, junto al dorado del Àliga, hace que quede muy elegante». Además, agradeció al Ayuntamiento de Tarragona y a Repsol, su patrocinador, que hayan esperado un año más para la presentación y hayan confiado en la entidad.
El artista Antoni Mas ha usado la misma técnica de construcción que utilizó para cincelar el Àliga. Primero da cuerpo y volumen a la paloma mediante la construcción de un esqueleto de hierro y luego se sueldan las plumas, de acero inoxidable, una por una sobre el esqueleto. Los ojos son de vidrio adquiridos a un maestro taxidermista.
El herrero de Vila-seca, además de contar como ha creado las palomas para ambas figuras del Seguici Popular de Tarragona, destacó durante su intervención que el hecho que el Àliga tenga la paloma en su pico no significa que se la esté comiendo. De hecho, esta es una interpretación de la imagen que no gusta a la entidad. Si en sus orígenes la paloma representaba el Espíritu Santo, actualmente simboliza el espíritu festivo de la ciudadanía. De esta manera, cuando el Águila, que representa la ciudad, sujeta la paloma, que simboliza la ciudadanía, estalla la fiesta en Tarragona, aseguran desde la colla.
Durante el acto también hablaron el jefe de comunicación externa de Repsol, Josep Bertran, y el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà. Ambos felicitaron a la entidad por la renovación del Àliga y de la Aligueta y ofrecieron buenas palabras para las dos figuras del Seguici. La presentación terminó, en primer lugar, con el baile del Bequetero por parte del Àliga y, acto seguido, la Aligueta se unió a su hermana mayor para bailar juntas el Amparito Roca.
Con todo, el Àliga estrenará su renovada imagen con las nuevas palomas en las tandas de lucimiento del Seguici Popular que tendrán lugar en la plaza de la Font tanto la vigilia, el día 22, como el propio día de Santa Tecla, el 23. Desde la entidad esperan poder celebrar unas fiestas con total normalidad a partir del año que viene.