El alcalde Rubén Viñuales (PSC) ya ha pasado lo peor del mandato. Aunque suene exagerado al no llevar ni un año y medio como primer edil de la Plaça de la Font, la aprobación el pasado viernes del presupuesto del 2025 supone un cambio de ritmo en la maratón que debe llevarlo hasta las Municipales del 2027.
¿Por qué es tan importante avalar las cuentas del próximo año? Tras sacar adelante el triple puerto de categoría especial que suponía aprobar en pocas semanas las ordenanzas fiscales, las terrazas y el presupuesto «en tiempo y forma» para el 1 de enero –todo con el aval de Junts y ECP–, ahora el PSC tendría suficiente con prorrogar las cuentas en 2026 y forzar una moción de confianza para las del 2027 para acabar el mandato con garantías,
Con el camino a medio plazo allanado –solo con el ascenso de primer nivel del POUM en el horizonte– puede haber llegado un buen momento para ampliar el gobierno municipal. Con todavía el 60% del mandato por recorrer, históricamente en Tarragona los pactos se han firmado siempre antes de llegar a media legislatura.
Joan Miquel Nadal (CiU) lo hizo en los primeros compases de las legislaturas con el PSC (1995) y el PP (1999 y 2003); Ballesteros (PSC) lo materializó al inicio del con Esquerra en 2007 y a los ocho meses con PP y Unió en 2016; mientras que Ricomà (ERC) firmó con Comuns al principio y, dos años después, con Junts per Tarragona y CUP justo el día que llegaba al 50% de la legislatura.
¿A ‘11’, ‘12’ o ‘14’?
Tras dos presupuestos, la subida de impuestos de este año y con la nueva ordenanza de las terrazas ya avalada, llega un buen tramo para que el PSC intente ampliar el ejecutivo. Puestos a encarrilar un gabinete en minoría, la gran pregunta es: ¿mejor a once con los Comuns o a 12 con Junts?
Consultado por el Diari, el alcalde Viñuales reitera su voluntad por ampliar a 14 con Junts y ECP, siguiendo «lo que ya hemos hecho con el presupuesto». Pese a ello, las dos formaciones son incompatibles por lo que los socialistas deberán escoger.
De momento, en el pacto presupuestario –por valor de 11 millones de euros– el PSC ha cambiado las tres ‘T’ de la campaña electoral –Talento, Tecnología y Turismo– por las 3 ‘C’: Collado, Carmona y Comuns. ¿La posible entrada de los progresistas en el Govern de la Generalitat podría ser un punto de inflexión para apostar por el 11?
Contrariamente, una posible entente a 12 con Junts puede tener un objetivo más estratégico. Viñuales y Jordi Sendra mantienen una excelente relación, por lo que convertir al portavoz soberanista en teniente de alcalde podría consolidarlo de cara al 2027 y tejer, de esta forma, una alianza de futuro a largo plazo. A Viñuales le ha llegado el momento de decantar la balanza. Per fer una truita s’han de trencar els ous.