La degradación del sector primario no es flor de un día. Da igual si es agricultura, ganadería o pesca: los datos certifican la debacle.
A la caída de la flota pesquera a la mitad en los últimos veinticinco años, como ya radiografió el Diari, se suma la consecuente reducción de la actividad: un 44% en los últimos 20 años.
Evolución de la flota pesquera en los puertos de Tarragona
Fuente: Departament d'Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural
Las capturas de la pesca marítima han bajado en picado también en todo el territorio catalán, ya que hay menos barcas que salgan a faenar. Los datos de Institut d’Estadística de Catalunya (Idescat) señalan que, en el 2000, Tarragona, con 17.447 toneladas, era la demarcación catalana con un peso mayor.
Diez años después, el dato ya había caído hasta las 11.036 toneladas y, en 2020, fue de 6.905. Las últimas estadísticas actualizadas exponen que, en 2023, fueron 6.669.
Son registros que no invitan al optimismo y que dejan claro que hacen falta medidas de choque para mantener vivo al sector primario.
La ciudad de Tarragona ha vivido en sus carnes esta reducción, ya que ha pasado de capturar 7.561,4 toneladas en el año 2000 a 4.095,7 hace diez años y 1.795,8 en la actualidad.
Lo mismo ha pasado en puertos tarraconenses como Torredembarra, Cambrils, Alcanar, La Ràpita, L’Ametlla de Mar, L’Ampolla o Deltebre.
Menos trabajadores
Los pescadores afiliados a la Seguridad Social –tanto por cuenta propia como por cuenta ajena– han caído también en los últimos años.
Se ha pasado de 2.096 en noviembre de 2014 –1.814 por cuenta ajena y 282 por cuenta propia– a 1.873 en noviembre de 2024 –1.545 asalariados y 328 autónomos–. En total, son 223 menos en una década, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
También ha bajado en Tarragona la población activa del sector primario: según el Institut d’Estadística de Catalunya (Idescat), ha pasado de 41.700 personas en el año 1977, el primero del que se tienen datos, hasta las 13.300 en 2023.
Evolución de la población activa del sector primario en Tarragona
Fuente: Institut d'Estadística de Catalunya (Idescat)
Por otro lado, el valor añadido bruto (VAB) –que mide la riqueza generada– del sector primario también está cayendo. Los registros del Idescat marcan que, en 2022, fue de 1.622 millones de euros en toda Catalunya, la estadística más baja desde el año 2000 –el primero con datos–.
Es un descenso del 20,5% en comparación con los resultados de 2021. Por otra parte, el avance del producto interior bruto (PIB) de 2023 indica que la disminución anual del sector fue del 17,6% en territorio catalán.