Una mujer 26 años fue detenida por la Guàrdia Urbana por atentado a funcionario público y por estar buscada por un Juzgado por estafa. Presuntamente, dio una patada a los genitales de una enfermera y después a los del vigilante de seguridad que acudió en ayuda.
El incidente se produjo sobre la una menos cuarto del martes. La detenida tiene a un familiar ingresado en dicho centro sanitario, que comparte habitación con otro paciente. A este le estaban realizando tareas de higiene personal cuando entró la procesada. Se le dijo que esperase fuera mientras tanto. Inicialmente salió de la habitación, pero poco después entró chillando y diciendo que no le daba la gana salir. La enfermera y su compañero de trabajo le volvieron a insistir en que esperase fuera, a lo que se negó. Le hizo una foto a la enfermera, le propinó una patada en la zona genital y le escupió en la cara. Posteriormente le dio una patada en los genitales del vigilante de seguridad.
Una patrulla de la Guàrdia Urbana que regulaba el tráfico en la zona del hospital acudió a la quinta planta, donde ocurrieron los hechos. La enfermera ya estaba en el servicio de Urgencias. El vigilante explicó lo sucedido, mientras que la sospechosa negó la agresión y dijo que le querían borrar una foto de su teléfono móvil.
Los agentes comprobaron que la mujer tenía pendiente una orden de búsqueda y detención del pasado 6 de febrero dictada por el Juzgado de lo Penal 4 de Tarragona por estafa. Los policías tuvieron que emplear la fuerza para detenerla ya que se resistió.
Detenido por un robo violento
Por otra parte, agentes del mismo cuerpo detuvieron a un joven marroquí de 19 años como sospechoso de un robo violento a dos menores en la calle Pere Martell a las 00.20 horas del martes. Las víctimas manifestaron que ciando iban hacia el Serrallo fueron asaltados por dos marroquíes y que posiblemente les lanzaron gas pimienta. Pidieron a las víctimas que les dieran la bebida que llevaban, mientras que uno de los asaltantes sustrajo a una de las víctimas con violencia un teléfono móvil.
Las víctimas persiguieron a los autores hasta el cruce de las calles Sant Andreu con Sant Pere, donde hubo una discusión hasta la llegada de la Guàrdia Urbana. Ambos autores se dieron a la fuga, aunque los agentes lograron detener a uno de ellos en la calle Pere Martell.
