Catalunya en Comú sube el tono contra su propia concejal, Carla Aguilar. La formación de Ada Colau explota contra las reservas que muestra la edil para avalar las cuentas municipales del Ayuntamiento de Tarragona para 2022.
Después de que el pasado 20 de diciembre los Comuns decidieron dar el «sí» al presupuesto por un margen de 19-6 –el 76% de los asistentes–, el pasado martes la ejecutiva municipal se reafirmó en este posicionamiento. «Así lo hemos trasladado a Podem», afirma en declaraciones al Diari el cocoordinador de la formación en la ciudad, Antoni Peco, quien también pide a la concejal que sea «consecuente» con este acuerdo y «con la decisión que tomó la militancia».
Cabe recordar que, en la comisión municipal de Serveis Centrals del Ayuntamiento del pasado 23 de diciembre previa al pleno municipal, Aguilar desoyó a su formación y votó «no» a la propuesta del gobierno local, justificando su postura en el contundente resultado de 33-0 en contra de las cuentas que se registró en la asamblea de Podem. Sumando los dos resultados, el margen es de 39-19 a favor de rechazar la propuesta del gobierno municipal, lo que llevó a Aguilar a apostar por el «no» para «preservar la unidad del espacio», pese a que las condiciones de las dos votaciones fueron diferentes: en una se avaló el voto delegado –en la de Podem– y en la otra no.
¿Y la declaración?
Tras la Navidad se ha iniciado una nueva fase de negociaciones. En la reunión con el ejecutivo del pasado viernes, la comisión negociadora de En Comú Podem puso sobre la mesa un paquete de 13 medidas a incluir en las cuentas que, sumadas, comportan un paquete económico de 4,5 millones de euros. Sobre ello, Peco es contundente. «Entendemos que, tras los últimos acuerdos con el equipo de gobierno se recogen, total o parcialmente, casi el 95% de nuestras propuestas», por lo que asegura que «no hay ningún motivo para no aprobar unos presupuestos que son positivos para la ciudad, en un contexto postpandémico y que debe ser de recuperación económica desde una perspectiva socialmente justa».
Asimismo, el cocoordinador considera que «las propuestas incorporadas mejoran sustancialmente el presupuesto inicial del equipo de gobierno en aspectos como el plan de mejora de los barrios, la vivienda social, la apuesta por la construcción de una residencia de gente gran pública, la deconstrucción de la plataforma del Miracle, la renaturalización del litoral, la creación de un centro social y cultural en la Plaza Imperial Tarraco y tantos otros proyectos».
En estos momentos, las diferencias entre Comuns y Podem es que los segundos quieren, antes de negociar el contenido de las cuentas, un «reconocimiento del error» de la ruptura del pasado mes de junio por parte del alcalde Ricomà por su pacto con Junts per Tarragona y la CUP, que derivó en la marcha de Carla Aguilar del gobierno local pero el mantenimiento del número ‘2’ de la candidatura progresista en las Municipales de 2019, Hermán Pinedo. Este jueves estaba prevista una reunión de la coordinadora entre ambos partidos, que al final se suspendió. Este periódico quiso conocer la opinión de Aguilar, quien rechazó hacer manifestaciones públicas. Mala peça al teler para los Comuns.
