Las 36 tortugas que nacieron el pasado jueves en la playa de la Savinosa en Tarragona, pero que necesitaron incubación artificial para garantizar su supervivencia, fueron liberadas este lunes por la tarde.
Son los últimos ejemplares que quedaban por entrar al mar del único nido de caretta caretta que ha habido este verano en Catalunya, a partir de una única puesta de una tortuga que hizo 90 huevos.
Durante estos días, han estado en el centro de recuperación de la Fundació per a la Conservació i Recuperació d’Animals Marins (CRAM).
Cerca de 200 personas se han reunido en la playa para ver cómo los pequeños reptiles entraban en el agua.
Dentro de quince o veinte años, las hembras regresarán a la misma playa para poner huevos y repetir el ciclo.
La oceanógrafa del CRAM, Sílvia Giralt, señaló que las crías “cuando nacieron estaban un poco inmaduras” y por eso se las llevaron a las incubadoras que tienen en la sede del CRAM.
Giralt indicó que, aunque ya estamos en septiembre, la temporada de anidación no ha terminado y todavía se pueden encontrar nidos esporádicos, especialmente en lugares donde no se haya detectado la llegada de tortugas hembras que hayan ido a criar. Además, pidió que si se detecta algún nido, no acercarse y llamar al 112.