Las conversaciones para dar una solución a los problemas de liquidez de la sección de crédito de la Cooperativa de La Canonja viven horas de máxima intensidad. Después de que a mediados de la semana pasada trascendiera que la entidad había bloqueado algunas operaciones por falta de fondos, ayer se celebró la primera reunión de la mesa de negociaciones. El objetivo es que esta misma semana pueda darse a conocer si finalmente el Ayuntamiento saldrá al rescate de esta entidad.
En la reunión se abordó la compra del edificio de la cooperativa y del inmueble en el que opera la sección de crédito por parte del Consistorio de La Canonja. En la oferta económica deberá tenerse en cuenta la venta de patrimonio, los depósitos y la cartera de préstamos para tapar un agujero que se sitúa entre los dos y los tres millones de euros.
Además del alcalde de La Canonja, Roc Muñoz, y el presidente de la Cooperativa, Josep Maria Veciana, a la reunión acudió también el delegat del Govern, Òscar Peris, y representantes de los departamentos de Agricultura y Economia. Los presidentes de la Federació de Cooperatives Agràries y de la Associació de Seccions de Crèdit (ASC) también estuvieron en un encuentro en el que ya se planteó la necesidad de definir una hoja de ruta para extinguir la sección de crédito y que sea otra entidad financiera la que asuma los depósitos. De hecho, la misma organización ya aseguró la semana pasada que hacía tiempo que estaba estudiando la posibilidad de deshacerse de esta actividad.
Tras la reunión, Josep Maria Veciana valoró que «las negociaciones van por buen camino, aunque no será hasta dentro de dos o tres días cuando podremos decir algo». Por ello, las partes se emplazaron de nuevo para esta misma semana. Aunque no quiso entrar en detalles, Veciana insistió en que las conversaciones «van por buen camino».
Por su parte, la administración local sigue estudiando a nivel interno la propuesta de la cooperativa. De hecho, la semana pasada, el alcalde de La Canonja, Roc Muñoz, ya aseguró que antes de tomar cualquier decisión el equipo de Gobierno quería tener toda la información sobre el estado real de las cuentas de este organismo y sobre «cuál es la situación que le ha llevado a estar así». El tema fue abordado en la reunión de Govern que cada lunes se celebra a nivel municipal.
Muchas preguntas
Los problemas de liquidez de esta sección de crédito empezaron a conocerse a mediados de la semana pasada. A medida que comenzó a correr la voz, algunos clientes se dirigieron a la entidad a retirar dinero y no se les permitió que pudieran cancelar sus cuentas.
Desde el Departament d’Economia i Hisenda del Govern de la Generalitat aseguraron que el informe de enero de la sección de crédito mostraba que «había la liquidez suficiente para afrontar las oscilaciones de depósitos».
Los afectados son los cerca de 650 socios colaboradores de una entidad que podría tener los días contados. Algunas voces ya hablan abiertamente de buscar una solución para los productores agrícolas que siguen con esta actividad en este municipio del Tarragonès y diluir la cooperativa. La estrategia pasa por diluir estos entes en las localidades en las que la actividad agraria es minoritaria.