La Generalitat de Catalunya acelera para que 2025 sea el año del albergue juvenil de la Ciutat de Repòs. Según ha podido saber el Diari, el Govern ya ha solicitado al Ayuntamiento de Tarragona la licencia de obras para avanzar en la tramitación administrativa de una obra que, según la ayuda de 15 millones de euros de los fondos Next Generation, deberá estar lista dentro de 371 días: el 31 de diciembre del 2025.
El Govern registró la solicitud con la presentación del proyecto ejecutivo. Fuentes municipales confirman que el plan tiene todos los informes favorables, y ahora solo está a la espera de recibir el OK de los Bombers para poder otorgar el permiso definitivo para empezar las actuaciones.
«El objetivo es iniciar las obras en el primer trimestre del 2025. Debe ser inminente porque hay un Next Generation y queremos cumplir con el calendario», indica la delegada del Govern en el Camp de Tarragona, Lucía López Cerdán (PSC), quien detalla que la concertación de una prórroga no es una opción que, a día de hoy, esté sobre la mesa.
«Es un espacio privilegiado y emblemático. Será un recinto que dará otro tipo de actividad al entorno de Llevant y Boscos», detalla en declaraciones a este periódico la máxima representante de la Generalitat en la demarcación.
Paralelamente, Drets Socials sacó a licitación el pasado mes de noviembre la dirección de obras, así como también el control de calidad. El montante global de ambos concursos públicos es de 395.000 euros: 295.000 el primero y 100.000 el segundo.
Centro cívico y zona deportiva
La pasada semana, el alcalde de Tarragona –Rubén Viñuales (PSC)–, expresó que Govern y Consistorio negocian «dos cesiones importantes» en la finca de la Ciutat de Repòs.
Por una parte, el Ayuntamiento tarraconense ha pedido la cesión del edificio de la entrada para poder ubicar allí el centro cívico de todo el entorno de Llevant, así como poder abrir a la ciudadanía las pistas deportivas para su uso público.
«Recientemente, hemos tenido una reunión con el director general de Patrimoni, y ambas cesiones están muy avanzadas», aseguró Viñuales tras ser consultado por el Diari.
Ahora, Lucía López Cerdán confirma que los contactos van en la buena dirección. «Se está trabajando en las cesiones de las zonas deportivas y en la recepción para que sea de uso del Ayuntamiento», recalca la delegada.
Actuación en siete pabellones
El gabinete Ensenyat-Tarrida Arquitectes ha sido la firma encargada de diseñar la reforma del histórico emplazamiento, que se encuentra en una parcela de 86.556 metros cuadrados, con una superficie construida de 17.379 m2.
En total, la rehabilitación del histórico espacio se llevará a cabo sobre siete pabellones. En cada uno de estos recintos se actuará de forma diferente, ya que se adaptará a la topografía. Entre todos los pabellones habrá 38 módulos habitacionales –generalmente con dos habitaciones cada uno– y cuatro espacios comunes de relación para los usuarios, con una cocina.
En global, el complejo contará con un total de 204 plazas, de las cuales el 18% –36– serán adaptadas. Por lo que se refiere a los espacios exteriores, el proyecto definitivo reserva una zona verde de 14.200 metros cuadrados, a la vez que también habrá otros 4.600 m2 para juegos infantiles y áreas adecuadas. A la vez, se reserva una zona de pistas deportivas de 44x32 metros, con dos pistas de baloncesto y una de fútbol cruzada y solapada.
Derribo parcial
El proyecto definitivo contempla que en el edificio principal del complejo se derribe toda la ala donde antiguamente se alojaba el personal que trabajó en el espacio hasta su cierre a finales del 2011, mientras que en la parte restante se recuperará la mayoría de la volumetría del inmueble original. En global, la superficie construida será de 3.781 metros cuadrados, incluyendo en las instalaciones un gran comedor que tendrá una capacidad para unos 400 comensales.
El presupuesto de las obras, con IVA incluido, es de 15,2 millones de euros, financiados por las ayudas europeas Next Generation. Estas comportan, sin embargo, que las actuaciones estén acabadas al final del 2025 para que, de esta forma, el recinto pueda abrir en 2026 como un albergue juvenil más de la red pública Xanascat.
La Ciutat de Repòs ya empieza a ver, pues, la luz al final de un túnel que se habrá alargado por espacio de 15 largos años.