La fiesta de Sant Joan se volverá a celebrar como antes

La verbena de Sant Joan llega este 2022 todavía en pandemia pero ya sin restricciones, a diferencia de los dos años anteriores, en los que no se pudo celebrar con normalidad. Así, los diferentes sectores económicos y culturales que tienen un papel clave en la festividad, como empresas pirotécnicas, pasteleros y panaderos, entidades populares y músicos, no dudan en augurar una gran fiesta.

«La gente tiene ganas de vivir, y una verbena es vida», señala Xavi Pàmies, responsable del Forn Sistaré de Reus. «Pensamos que será un Sant Joan muy bueno, en parte por todo el movimiento que hemos visto estos días en Reus con la fiesta de Corpus y las cocas de cerezas y con la gran cantidad de gente que vino a la feria Reus Viu el Vi», comenta Pàmies. En este sentido, su sensación a partir de las ventas de cocas de Sant Joan es que «quizás durante estos dos años la gente ha celebrado la verbena en un formato más reducido, con familiares y amigos muy cercanos, y en la de este año se juntarán más personas, como antes de la pandemia».

En esta misma línea, el presidente del Gremi d’Artesans Pastissers de les Comarques de Tarragona y propietario de la Pastisseria Conde de Tarragona, Josep González, asegura que «aunque la gente ha hecho todos los encargos de golpe estos últimos días, hay una particularidad y es que se compran cocas más grandes porque se juntarán más personas que el año pasado». Además, González piensa que «si no llegamos a vender las mismas unidades que en 2019, nos acercaremos mucho». Con todo, el pastelero se mostraba muy ilusionado: «Somos quienes damos el punto dulce a las fiestas, y Sant Joan es una de las que están marcadas en rojo en el calendario».

Otro de los sectores que puede medir bien cómo irá la verbena de Sant Joan es el de los petardos. Manel Estalella, CEO de la Pirotècnia Estalella, con las instalaciones centrales en Rodonyà, asegura que «las ventas están yendo muy bien, nos acercaremos a niveles de antes de la pandemia», y añade que «se están recuperando mucho las ventas asociadas a fiestas con ‘collas de diables’ y grupos y bestias de fuego». No obstante, David Montes, trabajador de la Pirotècnia Catalana, en Vimbodí i Poblet, lamenta que «la venta de petardos para la verbena está muy tranquila, es inferior incluso a la del año pasado».

Lo asocia, en parte, a la posibilidad de que, con el aumento de precios y un menor poder adquisitivo de las familias, estas estén esperando a última hora para comprar lo justo para la noche del 23. «Antes la gente venía ya una o dos semanas antes, compraba petardos y los tiraba antes de la verbena, y para la noche de Sant Joan volvían a comprar más», recuerda Montes, que dice que esto no está ocurriendo este año. A pesar de todo, coincide con Estalella en que «las ventas para ‘collas de diables’ están volviendo a la normalidad, no sólo para Sant Joan, sino también para todas las fiestas mayores de verano, que empiezan sobre todo a partir de julio».

Las entidades populares y culturales, sobre todo aquellas relacionadas con el fuego, suelen ser las encargadas de organizar fiestas o actos concretos de la verbena en muchos municipios. En el caso de la ciudad de Tarragona, la Colla de Diables Voramar del Serrallo - Víbria de Tarragona recupera la fiesta completa alrededor de la llegada de la Flama del Canigó. Varios miembros de la entidad irán a Reus a buscarla y la llevarán a Tarragona para encender, primero, la hoguera del Serrallo y, tras el ‘correfoc’, la de la Plaça Corsini. «Los miembros de la entidad tienen muchas ganas de volver a celebrar un Sant Joan como los de antes, y que además es el pistoletazo de salida a un verano con muchas fiestas mayores y en el que podremos tirar mucho fuego», celebra Bego Ibarrola, presidenta de los Diables Voramar y la Víbria.

Finalmente, el reconocido DJ tarraconense Albert Rayo asegura que «la gente tiene muchas ganas de fiesta». Al tratarse, además, de un Sant Joan que cae en puente, los conciertos populares se alargarán durante todo el fin de semana en muchos municipios. De hecho, Rayo, aunque no actuará esta noche por cuestiones personales, ha sido contratado para cinco ‘bolos’, desde ayer por la noche hasta el domingo por la noche. «Para la verbena no puedo pinchar y he tenido que declinar cinco ofertas, pero el resto de días los tengo llenos, y sé de otros compañeros que tampoco pararán», comenta.