La Comisión Europea estudiará la viabilidad del paso de las mercancías por el interior de la demarcación y no por el actual Corredor del Mediterrani. Así lo ha apuntado al Diari el doctor Sergio Nasarre, catedrático de Derecho Civil de la Universitat Rovira i Virgili que en la mañana de este martes ha planteado la cuestión ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo (PETI).
Nasarre, fundador de la Càtedra Unesco d’Habitatge de la URV y doctor europeo en Derecho –además de máster en Economía Inmobiliaria por la Universidad de Cambridge–, ha estado este martes en Bruselas para presentar la queja de la Plataforma Mercaderies per l’Interior ante esta comisión del Parlamento Europeo.
La intervención, que ha durado unos siete minutos, ha servido para que Nasarre expusiera a casi un centenar de políticos de diferentes partidos los peligros que supone que las mercancías ferroviarias pasen por en medio de poblaciones como Tarragona, Altafulla o Torredembarra, y también a 50 metros de un monumento como es el Amfiteatre, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Y también por en medio del espacio protegido por la Xarxa Natura 2000 entre Tarragona y Altafulla. Y subrayaba los problemas que ocasiona: «Vibraciones, ruidos, posibilidades de fugas, lenguas de fuego». Comentaba que con el tercer carril «el futuro de Tarragona queda completamente hipotecado, divorciados del mar. Y si comienzan a poner pantallas acústicas, habrá guetos».
A la vez, y como alternativa, Nasarre ha querido ser positivo y ha planteado a la comisión lo que llevan años afirmando: la necesidad de que los trenes de mercancías pasen por el interior, aprovechando en un 80 ó 90 por ciento la línea de alta velocidad por las noche. Y ello hasta que llegue una solución definitiva, «que vendrá dentro de 15 ó 20 años».
«Hemos pedido que se abandone el tercer carril». Y lo justificaba: «tenemos muchos informes técnicos que demuestran el enorme peligro que supone que estos trenes utilicen el Corredor del Mediterrani. Porque puede afectar a la vía y a la salud de la personas».
Cabe recordar que el Corredor del Mediterrani recibe ayudas de la Unión Europea para segregar las mercancías ferroviarias per una vía eficiente y exclusiva. Pero en cambio, actualmente pasará todo lo contrario entre Vila-seca y Sant Vicenç de Calders: todas las mercancías irán por la misma vía que las personas, generando colapso.
Tras oír la explicación, todos los miembros de la comisión –excepto los socialistas, que han votado en contra, y los verdes, que no han acudido– han admitido a trámite la queja. «La comisión ha estado sensible»
A su vez, la PETI ha solicitado información a la Comisión Europea. Por un lado, le insta a que pida a España el informe de riesgo ambiental del tercer carril. «No lo encontrarán, ya que ni el ministerio ni Adif nunca lo han hecho», decía Nasarre. «Si lo hubieran hecho hace 15 años, no estaríamos hablando de eso porque se habrían percatado del peligro», subrayaba. Y añadía que la plataforma lo ha estado pidiendo desde hace seis años.
Por otro lado, la comisión ha solicitado que se pida a España que explique porqué ha descartado el paso de las mercancías por el interior y que diga si es viable o no. Para la plataforma, solo costaría entre 20 y 30 millones de euros y podría ser una realidad en un año y medio. «Tenemos ingenieros que han hecho este estudio y dice que es posible».
Nasarre se ha mostrado muy satisfecho por la decisión de la Comisión de Peticiones ya que normalmente las archiva al momento. En cambio, en este caso no solo la ha aceptado sino que ha instado a la Comisión Europea a involucrarse «y por la vía de urgencia».
El profesor de la URV se quejaba que hasta ahora en España no ha habido «voluntad política en este tema» y que ahora habrá «voluntad política forzosa» ya que el Gobierno central tendrá que contestar a las cuestiones planteadas por la Comisión Europea.