Durante el primer semestre del año que viene Tarragona contará con una nueva comisaría de proximidad ubicada en la Plaça Imperial Tarraco, dentro de la estación de autobuses. Así lo ha explicado el conseller d’Interior, Josep Ignasi Elena al finalizar la Junta Local de Seguretat.
En el nuevo equipamiento en pleno centro trabajarán conjuntamente la Guàrdia Urbana de Tarragona y los Mossos d’Esquadra. En los próximos meses se firmará el convenio entre Generalitat y Ayuntamiento y como no hay que construir ningún espacio, Elena confía en que se pueda poner en marcha en poco tiempo.
Justamente, como explica Ramón Franquès, inspector en jefe del área policial de los Mossos en Tarragona, el centro de la ciudad en general, y en concreto la Plaça Corsini y la Plaça de la Font son las zonas donde se denuncian más delitos en la ciudad y no en áreas periféricas de la ciudad como se podría presuponer. Esta atracción por el centro, explica, tiene que ver con la actividad comercial y turística que se desarrolla en la zona.
Bajan los delitos respecto la 2019
Tanto Elena como el alcalde Pau Ricomà, también presente en la junta, han repetido con insistencia la frase de que «Tarragona es una ciudad segura».
La junta ha servido para hacer balance de los hechos delictivos en la ciudad. El principal dato es que han bajado de 10.574 a 9.231 respecto al año 2019, un 12.7%. Para la comparación toman ese año como referencia porque, aseguran, así se evita la ‘distorsión’ de la pandemia ya que en 2021 todavía había restricciones.
La concejal de Seguretat Ciutadana, Cristina Guzmán, ha desgranado los datos y señala, por ejemplo, que los robos con fuerza han bajado en un 15% y los violentos un 16% «que son los que más nos suelen preocupar a los cuerpos de seguridad».
Guzmán también explica que este año se han producido 931 accidentes de tráfico. Se trata de un incremento en el número de accidentes del 18% respecto al 2021 y del 7% respecto al año 2019, aunque destaca que se ha conseguido la reducción de los atropellos en un 43% respecto al 2021 y del 23% respecto al 2019. Destaca, además, que no se produjo ninguna muerte en la ciudad por estas causas.
La concejal, igual que el alcalde, considera que la disminución de la gravedad de los accidentes tiene que ver con la puesta en marcha de la Ciutat 30 y otras acciones preventivas como el repintado de algunos pasos de peatones y la mejora de señales.
Mención aparte merecen los delitos relacionados con vehículos de movilidad personal, VMP. Este año se han producido 558 denuncias y 31 incidentes por accidentes con el tráfico rodado. La mayoría de los accidentes se produjeron en la calzada por colisión o envestida con el resultado de heridos leves. En concreto las infracciones cometidas por bicicletas se redujeron un 49% mientras que las de los monopatines bajaron un 89%. Este último dato, reconoce Guzmán, está estrechamente relacionado con el hecho de que varias empresas de alquiler han abandonado la ciudad este año.