La construcción del nuevo tanatorio, ubicado dentro del cementerio, se retrasa unos meses por culpa de la tramitación. En un principio, la previsión era tenerlo listo el año que viene. Pero la elaboración de un pequeño plan parcial por parte de los propietarios, y todo lo que ello implica, ha pospuesto su puesta en marcha. Pese a ello, todo parece indicar que el nuevo tanatorio será una realidad a lo largo del año 2024. Se trata de un proyecto conjunto entre la Fundació Hospital Sant Pau i Santa Tecla y la empresa Mémora, quienes han creado una nueva sociedad para la gestión y explotación del que será el segundo tanatorio de la ciudad.
A mediados de 2020, la Fundació –propietaria del cementerio– anunciaba la construcción de un tanatorio dentro de las instalaciones del cementerio. A principios de este año, la entidad solicitaba la licencia de obras al Ayuntamiento de Tarragona para poder empezar los trabajos. Pero se encontraron con qué tenían que elaborar un pequeño plan parcial especial que justificara la compatibilidad urbanística del solar donde se construirá el tanatorio. Y es que el nuevo equipamiento debe tener una entrada y una salida a la calle.
En este caso, el vial de acceso se llevará a cabo por la puerta lateral del cementerio. Aquella que se abre cuando se prevé una gran afluencia de público, como por ejemplo, el día de Tots Sants. Esta ubicada justo delante del parking disuasivo del cementerio, en el Camí del Llorito. Por esta puerta entrarán tanto los peatones como los vehículos, que podrán aparcar en un aparcamiento subterráneo, situado debajo del nuevo tanatorio.
Los arquitectos de la Fundació Hospital se pusieron manos a la obra y, en octubre, presentaron al Ayuntamiento el plan parcial. No fue hasta el 2 de noviembre, cuando se acabó de entregar toda la documentación necesaria. Y es que en la primera versión faltaba un anexo imprescindible para poder llevar a cabo la tramitación ambiental.
Con el plan parcial listo, ahora la pelota está sobre el tejado del Ayuntamiento. El Consistorio debe informar a la Oficina Territorial d’Acció i Avaluació Ambiental, para que emita un documento que determine si las obras pueden conllevar una afectación ambiental o no. Si todo es correcto, la aprobación inicial podría llevarse a cabo a principios del año que viene. Al tratarse de un plan parcial, será la Comissió d’Urbanisme de la Generalitat quien deberá hacer la aprobación definitiva. Con todos estos pasos hechos, el Ayuntamiento de Tarragona podrá dar la licencia para que empiecen las obras del tanatorio.
18 meses
«El calendario se ha retrasado unos meses por culpa de la tramitación, pero calculamos que a finales de año se haya desbloqueado el tema», explica Fernando Sánchez, director de comunicación de Mémora Serveis Funeraris del Camp SL, empresa que se encargará de la gestión del nuevo tanatorio. Sánchez añade que «nuestra previsión es poder construir el equipamiento en un plazo de 18 meses».
El director de comunicación de la empresa destaca que este tanatorio será «el más moderno, y el más emblemático», y recuerda que «Tarragona debe ser de las pocas ciudades catalanas, en la que la administración pública cuenta con el monopolio en materia de servicios funerarios». Sánchez opina que, con el nuevo equipamiento, «se podrá garantizar la libertad de elección de las familias».
6 millones de euros
El proyecto del nuevo tanatorio representará una inversión de más de seis millones de euros y el edificio estará distribuido en dos partes. En una se ubicará la zona de trabajo, cinco salas de velatorio y un oratorio. En la otra estará el vestíbulo de acceso y un espacio amplio desde donde se disfrutará de una vista lejana de la ciudad. El edificio incorporará espacios exteriores que funcionarán como punto de encuentro o zona de despedida. El inmueble contará con una planta baja y un piso, con una cubierta ajardinada.