La Guardia Civil ha interceptado en la costa de Tarragona un alijo de 68 fardos de hachís con unos 2.400 kilos de esta sustancia estupefaciente valorados en 3,5 millones de euros, según informa este viernes el instituto armado en un comunicado.
El decomiso de este alijo, a cargo de investigadores de la Unidad de Policía Judicial junto con agentes del Servicio Fiscal de la Guardia Civil y del Servicio Marítimo, se produjo en la madrugada del pasado martes mientras los narcotraficantes estaban realizando el desembarco del hachís en una cala de difícil acceso de la localidad de Tarragona.
Los agentes del Servicio Fiscal que realizan labores preventivas de vigilancia del litoral se percataron de que en la madrugada del martes 3 de agosto una embarcación se aproximaba a la costa, en dirección a una cala de muy difícil acceso del litoral tarraconense (Cala de la Roca Plana), situada en una zona abrupta del Bosc de la Marquesa.
Este hecho levantó las sospechas de los agentes, por lo que se puso en marcha un operativo de respuesta con el fin de neutralizar el posible alijo, que se desplegó en la zona de la costa a la que se dirigía la embarcación.
Los agentes observaron que los narcotraficantes habían dispuesto barricadas y cadenas con candados en los dos únicos accesos a la cala, dificultando así la llegada hasta el lugar dónde se estaba produciendo el desembarco de la droga.
Los miembros de la organización criminal habían establecido además puntos de vigilancia para avisar ante la posible llegada de efectivos policiales, y poder así emprender la huida con rapidez.
Tras percatarse de la presencia de los agentes de la Guardia Civil, las personas que estaban participando en las labores de descarga emprendieron la fuga a pie por el bosque, abandonando los fardos y una furgoneta de carga.
Asimismo, la embarcación semirrígida utilizada para alijar, ocupada por varias personas, viró y se adentró mar adentro a gran velocidad, sin que se le pudiera dar alcance.
En la operación, la Guardia Civil halló un total de 68 fardos de hachís con un peso de 2.400 kilos y un valor estimado de 3.500.000 euros, así como una furgoneta de gran capacidad que iba a ser empleada para transportar la droga.
Investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil han abierto una investigación para identificar a las personas que participaron en esta operación de tráfico de drogas, mientras que el juzgado de Instrucción número 4 de Tarragona se ha hecho cargo de las diligencias.