Representantes de los trabajadores del Hospital Joan XXIII y de la dirección del centro han acordado tirar adelante una mesa de trabajo para abordar el tema de la falta de aparcamiento en el entorno del hospital. La mesa estará formada por todos los agentes implicados en la problemática: desde los profesionales, hasta los vecinos, pasando por el Institut Català de la Salut (ICS), el Departament de Salut y el Ayuntamiento de Tarragona. El objetivo es encontrar una solución alternativa a la falta de aparcamiento, tanto mientras duren las obras –hasta 2028– como cuando se ponga en marcha el nuevo complejo sanitario.
La medida se acordó ayer durante una reunión entre la junta de personal y los responsables del Joan XXIII, después de muchas semanas de reivindicaciones por parte del personal y de oídos sordos por parte de la administración.
El problema surge hace dos meses, cuando el inicio de las obras del nuevo Hospital Joan XXIII obligaron a cerrar el parking de trabajadores, que albergaba más de 250 vehículos. La medida coincidía con el cambio de zonas reguladas en el entorno del hospital. El Ayuntamiento decidía convertir en zona verde casi cien plazas de zona naranja –las de un euro al día–. La tormenta perfecta que terminó con la paciencia de los trabajadores. El personal se queja de tener que pagar zona verde para ir a trabajar –unos cuatro euros por dos horas–. «Llevamos muchos meses alertando de qué pasaría esto. No se ha hecho nada hasta que nos lo hemos encontrado de frente», explica Àngel Chavez, presidente de la junta de personal del Hospital Joan XXIII, quien asegura que intentar aparcar el coche en el entorno del Francolí después de las siete y media de la mañana es «misión imposible».
La primera sesión será en abril
La propuesta de la mesa de trabaja surge directamente de los profesionales. «Ahora, tendremos la oportunidad de hacer escuchar nuestra voz y de poder presentar nuestras propuestas e ideas para encontrar la solución», explica Chavez.
La previsión es que la primera sesión de la mesa tenga lugar el próximo mes de abril, una vez cada colectivo haya escogido sus representantes. «Ya no solo nos preocupa la falta de aparcamiento durante las obras. También queremos saber donde aparcaremos los trabajadores cuando entre en funcionamiento el nuevo hospital», añade el presidente de la junta de personal.
Por su parte, la Generalitat, tal como se comprometió, sigue buscando soluciones para poder habilitar un solar que funcione como aparcamiento –aunque sea de pago– para los profesionales.