«Hoy es un día especial para el ciclismo catalán. Tarragona necesitaba urgentemente esta instalación», comentaba durante la inauguración celebrada hoy Joaquim Vilaplana, presidente de la Federació Catalana de Ciclisme sobre el reciente lavado de cara que se le ha dado al velódromo municipal de Tarragona.
Este espacio, que se encuentra ubicado en la Anella Mediterrània al lado del barrio de Campclar, es uno de los seis velódromos que hay en toda Catalunya, y tenía desgastes evidentes provocados por el uso y el paso del tiempo.
«El velódromo de Tarragona será otro referente en Catalunya. Aquí haremos pruebas de la Copa Catalana y a su vez pediremos al consistorio que en 2025 se puedan celebrar los campeonatos de Catalunya de pista en todas sus categorías», destacaba Vilaplana.
Los trabajos de remodelación del proyecto se han alargado dos meses y han consistido principalmente en la adecuación y pintura del pavimento, en la instalación de 570 asientos en las gradas –de color azul– y en la creación de un mural frontal, donde destaca la presencia de los anillos de los Juegos Mediterráneos de 2018 y de Tarracus, la mascota representativa.
«Los trabajos de remodelación eran evidentes, pero quisimos ir un poco más allá y añadir elementos nuevos. Los asientos de las gradas fueron uno de estos elementos, así como la instalación de las pistas de baloncesto», destacaba el concejal d’Esports de la Generalitat de Catalunya, Berni Álvarez.
Todo en uno
El velódromo será usado principalmente por los ciclistas, aunque la implementación de dos pistas 3x3 de baloncesto con canastas antivandálicas pretende acoger una liga local y momentos públicos de «encuentros sociales y deportivos», según Álvarez. La instalación de estas pistas en la zona central las hace compatibles con la realización de cualquier otro tipo de deporte, ya que las mismas cestas se pueden sacar y volver a colocar.
Aunque el velódromo y sus pistas ya están en pleno uso, en los dos extremos de la pista central falta por colocar dos bases de césped artificial, ya que el área terriza de esa zona aún está pendiente de recibir esta implementación.
Además de esto, el velódromo también dispone de un patinódromo y de una pista polivalente.
«La verdad es que está bastante bien. Lo han dejado como nuevo y que hayan puesto dos canastas me ha parecido muy buena idea para aprovechar más el espacio que hay», opina Francisco Reyes, vecino tarraconense.
«Con la finalización de estas mejoras, el equipamiento dará cabida durante la semana a ciclistas, patinadores y jugadores de baloncesto, pasando a incorporarse a la red de equipamiento y preparados para acoger turismo deportivo», comentaba el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales.
Se estima que unos 125 deportistas entre los clubs de patinaje y ciclismo harán uso del velódromo. Los clubes de patinaje que ya lo utilizan son el Club Dojo Tarragona, el Club Patí Fènix y el Nàstic de Tarragona, y a partir de esta temporada reanudará su utilización el club ciclista Campoclaro, junto con la Federació Catalana de Ciclisme.
La empresa adjudicataria de las obras del velódromo ha sido Complementos y Materiales Varios S. L. y el presupuesto de los trabajos ha sido de 46.555,80 €, IVA incluido.