El conductor de la empresa de autobuses Plana acusado de matar a un superior (responsable de recursos humanos) el pasado 4 de octubre seguirá en prisión hasta la celebración del juicio.
Así lo ha notificado a las partes hoy jueves, 21 de noviembre, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Tarragona tras emitir el auto sobre el recurso de apelación presentado el pasado día 14 de este mes.
De esta forma, el trabajador (de 47 años) acusado de matar seguirá en una celda de la cárcel de Tarragona, el Centro Penitenciario de Mas d’Enric, en la localidad de El Catllar, según ya había ordenado el juez del Juzgado de Instrucción número 2 el pasado día 7 de octubre.
Según expone el auto de la Audiencia, éste expone que las pruebas deberán ser valoradas plenamente el día del juicio, pero a su vez argumenta que se deben valorar los indicios existentes haciendo un pronóstico sobre la gravedad de la conducta y las graves consecuencias punitivas (que puede imponerse en la sentencia).
La misma Audiencia Provincial remarca en su escrito que cuando se acordó la prisión, aún no se había producido la muerte del ejecutivo de la empresa, pero ahora, tras el fallecimiento de este directivo de Reus, deben modificarse las calificaciones jurídicas, dejando abierta la posibilidad de que las acusaciones formulen cargos por homicidio doloso o incluso asesinato.
Fuentes conocedoras del caso apuntan que las imágenes recopiladas del día de la agresión son reveladoras, indicando que las lesiones que causaron la muerte fueron producto del único golpe que el acusado dio a la víctima en la cabeza, descartando que cualquier otro factor haya influido en el resultado final (según el informe de la autopsia).
También expone el auto de la Audiencia que «las penas a las que se enfrenta el investigado son de especial gravedad y comportan un elevado riesgo de fuga. Cabe recordar que el acusado es natural de la República Dominicana y este país del Caribe sí tiene tratado de extradición con España. Pero este acuerdo bilateral no existe con Haití, país fronterizo y que podría ser su destino final para eludir la cárcel. Y por esta razón, la orden de prisión tendría su argumento de peso para mantenerla en pie.
Las mismas fuentes apuntan que la «Audiencia confirma como correcta la tesis del juez instructor y de las acusaciones sobre la existencia de voluntad del agresor de causar la muerte de su compañero de trabajo».