El Ayuntamiento de Tarragona ha recurrido el archivo de la causa penal del caso Jaume I, que investiga presuntas irregularidades en la construcción de un aparcamiento subterráneo.
La polémica empezó hace dos décadas por un parking que tenía que costar 3,9 MEUR, que de momento ha costado 30 MEUR y que no ha entrado nunca en funcionamiento.
Ahora, el juzgado de instrucción número 3 de Tarragona ha dictado un auto de sobreseimiento de la causa. El consistorio reclama que se practique una prueba "sustancial, que es el recorrido del dinero, por si ha habido malversación", ha explicado el conseller de Serveis Generals, Jordi Fortuny.
Relacionada con la cuestión está también abierto un proceso mercantil que se encuentra en el Tribunal Supremo.