El alcalde de Vila-seca, Pere Segura (junts), se muestra especialmente crítico con la gestión del corte de Roda de Berà, acusando a Renfe de «falta de planificación».
«De momento, hoy hay mucha tranquilidad. Hay cierta expectación, pero este martes es un día extraño porque está claro que, debido a la tensión, hay usuarios que han emigrado buscándose la vida hacia el vehículo privado».
Por ello, el político juntaire considera que el análisis de la situación «deberá hacerse en los próximos días, cuando todos los usuarios vuelvan a la normalidad».
El alcalde de Vila-seca y presidente del grupo de Junts en la Diputació de Tarragona, atribuye la situación de este martes a la falta de planificación: «este es un país que define las infraestructuras y las actuaciones con un alto grado de improvisación , no podemos estar hablando unos años de un proyecto de Roda de Berà y en paralelo no diseñar unas obras complementarias para adaptar todas las afectaciones», afirma.
Asimismo, Segura critica que «estos días todo el mundo ha ido corriendo y se han hecho muchas reuniones. Han pintado el suelo para poner paradas de autocar de cualquier forma. Esto ha hecho que hoy solo hayan utilizado el tren o el bus 10 o el 15% de los usuarios habituales».
A juicio de Junts per Catalunya, «si nos creemos el transporte público y las infraestructuras, debía haberse apostado por alternativas que eran fáciles y viables, como, por ejemplo, el enlace de Vila-seca, que tiene hecha la estructura, se habrían podido agilizar los certificados y las homologaciones para darle utilidad».
De esta forma, a juicio de Segura, «habríamos tenido conexión directa con Barcelona y, en cambio, ahora estamos con buses lanzadera y en trenes pasando por Picamoixons con trayectos que duran tres horas. Se está obligando a hacer el camino de Sant Jaume a la gente para ir a Barcelona, a sus puestos de trabajo o a estudiar o realizar sus gestiones diarias cuando había alternativas».