Algunos municipios de la demarcación llegan a tener fugas de hasta el 40% del suministro de agua. Para evitarlo, la Diputació pondrá en marcha un nuevo plan que permitirá mejorar la gestión y hacer frente a la actual y a futuras situaciones de sequía.
La totalidad del proyecto, que cuenta con tres ejes, requerirá de una inversión de diez millones de euros y afectará a 120 municipios de menos de 20.000 habitantes.
Para financiarlo, la institución lo ha presentado a la segunda convocatoria de proyectos de mejora del ciclo urbano del agua en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) - PERTE, que se trata de una ayuda de fondos europeos.
La resolución, según la presidenta de la Diputació, Noemí Llauradó, «llegará en los próximos días». Se confía en que sea positiva; sin embargo, el ente, sin esperar a la notificación, ya ha decidido realizar una primera inversión.
Será de 1,9 millones para que cada uno de los 120 municipios implicados –que tienen la gestión directa del agua– pueda, en 2027, contar con una planificación y un diagnóstico de cómo está su red de suministro.
Por otra parte, este primer paso también prevé la elaboración de diferentes planes: de emergencia, sanitarios o de gestión de los sistemas de saneamiento.
«Este es el mandato del agua y, aunque ha habido algunas lluvias últimamente, aún hay municipios con problemáticas de sequía y las instituciones deben implicarse»
Llauradó se ha mostrado convencida de que la resolución será positiva: «La primera parte está asegurada y confiamos en que reunimos todos los requisitos para ser beneficiarios de la ayuda».
El segundo eje de la iniciativa, cuyo calendario se valorará una vez se cuente con la resolución de la subvención, consistiría en poner en marcha infraestructuras para digitalizar la red a través de sensores y contadores digitales, entre otras.
Por su parte, el tercer y último eje contemplaría aspectos como la activación de un software que permita a los ciudadanos consultar información detallada sobre cómo evoluciona el consumo de agua en cada municipio.
El plan ImpulsDipta, complementario
Además del proyecto mencionado, la Diputació de Tarragona cuenta con el plan de financiación ImpulsDipta, que está destinado a todos los municipios de la demarcación.
Esta vía pone a disposición de los ayuntamientos recursos económicos para mejorar las infraestructuras de las redes de agua municipales. En esta línea, el ente cubre el 98% del presupuesto de las reparaciones.
De esta forma, el ImpulsDipta actuará como una vía de ayudas complementarias al diagnóstico que se efectúe en el marco del plan que la Diputació ha presentado al PERTE. En total, 142.669 vecinos se verían beneficiados por esta última iniciativa.
«Este es el mandato del agua y, aunque ha habido algunas lluvias últimamente, aún hay municipios con problemáticas de sequía y las instituciones deben implicarse», ha remarcado Llauradó, quien también ha insistido en la necesidad de actuar para solventar los problemas de fugas de las redes de algunos municipios.