Los jardines de la Casa Joan Miret fueron el escenario ideal para la celebración del primer cóctel-cena de verano del Rotary Club Metropolità del Camp de Tarragona.
Fue una velada amenizada con música en un espacio idílico del imaginario tarraconense. Asistieron personalidades destacadas del territorio, entre ellas el subdelegado del Gobierno en Tarragona, Santiago Castellà —que a su vez es presidente de la entidad—; el presidente de PIMEComerç Tarragona, Florenci Nieto —secretario del Rotary Club—, o el president del Port de Tarragona, Saül Garreta, además de políticos municipales e integrantes del tejido económico y mediático.
En total, fueron más de cien personas, que comenzaron a llegar minutos antes de las 21.00 horas, recibidas por el presidente y la junta de la entidad. Una recepción maridada por el músico y compositor Roberto González Klawitter.
El macero –maestro de ceremonias rotario– de la entidad, Jordi Sierra, fue el encargado de dar la bienvenida a los asistentes y de agradecer a Ana Ibars, la directora del Grupo AG Planning, la gestión de la Casa Joan Miret.
«Tenemos muchas ideas de temas para el próximo semestre porque el rotarismo es una vocación de gente que cree que, en su espacio personal, debe dedicar un tiempo al espacio público y a que funcionen mejor las cosas», Santiago Castellà, subdelegado del Gobierno en Tarragona y presidente de la entidad
Además, antes de comenzar formalmente la velada, se entregaron las insignias a los nuevos integrantes que ya forman parte del club: Roger Trillas, Urbano Rifaterra, Estela Martín, Josep Maria Tost, Leandro Martínez, José Luis Martín, Yolanda Ortega y Jesús Gómez.
Posteriormente, fue el turno de subdelegado del Gobierno, quien hizo sonar la campana rotaria –una liturgia habitual en los Rotary–. Campana que, además, lleva el nombre de la pareja del primer presidente –Graci– y de la patrona de la ciudad –Tecla–.
En su discurso de bienvenida, Castellà puso en valor esta entidad como «un punto de encuentro para hablar sobre temas importantes de este territorio».
El organismo celebra, los últimos viernes de cada mes, unos desayunos para establecer un tejido social y charlar sobre diferentes ámbitos.
«El Rotary es un punto de encuentro para hablar sobre temas importantes de este territorio», Santiago Castellà, subdelegado del Gobierno en Tarragona y presidente de la entidad
«Tenemos muchas ideas de temas para el próximo semestre porque el rotarismo es una vocación de gente que cree que, en su espacio personal, debe dedicar un tiempo al espacio público y a que funcionen mejor las cosas», comentó el subdelegado, quien rechazó la idea de «ser un lobby» ni de «tener una opinión».
Por ese motivo, Castellà instó a los asistentes de presentarse y de conocerse entre ellos para generar más sinergias de territorio.