Una ruta por la obra escultórica en Reus de Modest Gené permitió ayer a un grupo de asistentes profundizar en el trabajo del artista. La salida, en la que estuvieron las dos hijas de Gené, M. del Carme y M. Glòria, forma parte de una serie de actividades dedicadas al escultor, programadas por el Centre d’Amics de Reus (CAR). La primera, una charla con el título Inici i projecció artística, se llevó a cabo el pasado jueves. La próxima y última –cuyo título es Modest Gené, el poeta de la raça africana– se hará el 31 de marzo en el CAR (19h).
La ruta de ayer comenzó en el Temple de la Sang. M. del Carme Gené, que condujo el acto, aportó varios datos biográficos de su padre. «La familia era del barrio. En frente del templo está la casa natal, donde hay una placa, colocada en 1984, en el primer aniversario de su fallecimiento», indicó. A lo largo de su intervención, nombró trabajos del escultor que se pudieron admirar en dicha parroquia: el Sant Crist, el Crist Jacent y la Carrossa Procesional del Sant Sepulcre. Sobre el Crist Jacent, dijo que «se expuso en la primera feria de muestras de Reus, en una sección sobre imaginería religiosa». Al salir del Temple de la Sang y, a pesar de la lluvia, la ruta continuó por varios puntos. Antes, una curiosidad: M. del Carme Gené detuvo a los asistentes en la Confiteria Padreny. Allí, explicó que Modest Gené creó un tió para la familia del histórico negocio. Glòria Vicheto, al frente del establecimiento, aportó ayer que «mi padre recibió este tió en los años 30, es el que hemos disfrutado toda la familia». Otra ubicación fue la plaza del Mercadal donde, entre otras creaciones, Gené nombró el escudo de Reus, «para la fachada del edificio del Ayuntamiento». La ruta siguió en el Centre de Lectura y, entre otros ítems, dedicó unas palabras al trabajo en bronce de: Portador de cocos, en la Sala Emili Argilaga. La Prioral de Sant Pere fue otra parada, allí destacó la imagen de Santa Llúcia, estofada y policromada. «Hay que reivindicar más su trabajo y convertir la ruta en oficial», declaró.
Ya en la Església de Sant Francesc, Francesc-Xavier Sirolla, de la Confraria de Nostre Pare Jesús del Calvari, se sumó a la ruta para detallar que «aquí hay seis figuras del artista». Los visitantes observaron una de las tres imágenes del paso de Nostre Pare Jesús del Calvari, la talla de madera de Jesús con la cruz (el resto están guardadas y son la del Cirineu y la del Centurió Romà); vieron también el grupo escultórico de la Santíssima Pietat, de la Reial Congregació dels Dolors, la escultura de la Immaculada y la imagen de Santa Maria Magdalena. La ruta continuó, siendo del agrado de los asistentes esta iniciativa.