Reus contará a finales de septiembre con un espectacular centro de ocio que combinará deporte y bienestar. Se ubicará en Mas Sedó, la conocida finca que durante casi dos décadas funcionó como centro de banquetes y convenciones y que ahora experimentará una transformación total de su modelo de negocio aprovechando el enorme potencial de su espacio.
La inversión llega de la mano de un grupo empresarial local que posee diversos activos en la Costa Daurada, entre ellos este complejo de 3,5 hectáreas de extensión situado junto a la carretera de Riudoms.
Supone un gran desembolso para poder convertir en realidad este proyecto que una vez entre en funcionamiento en sus distintas áreas empleará a 60 personas, según ha podido confirmar Diari de Tarragona.
Uno de los principales atractivos del nuevo centro serán sus 18 pistas de pádel al aire libre, lo que convertirá Mas Sedó en la instalación de toda la demarcación con el mayor número de canchas de esta especialidad tan de moda que sigue creciendo en adeptos y practicantes.
Este pasado jueves comenzó la cimentación sobre la que se ubicarán las superficies de juego, distribuidas alrededor de la finca y todas ellas rodeadas de agradables espacios verdes. Una de las pistas ejercerá como central y dispondrá de una grada para que los espectadores puedan seguir cómodamente las finales de los torneos que se disputen.
Un gimnasio de 2.000 metros cuadrados de superficie, con máquinas y tecnología de última generación, se sumará a la oferta para la práctica de la actividad física junto una zona de spa y dos piscinas exteriores climatizadas (la temperatura puede llegar a 28 grados, lo que posibilitará alargar la temporada de baño).
Tanto el gimnasio como la zona de las pistas de pádel contarán con unos amplios vestuarios propios.
Los espacios de ocio tendrán igualmente un enorme protagonismo en el nuevo Mas Sedó. Destacará una gran zona de conciertos al aire libre, con capacidad para 3.500 personas, donde antes se situaba un gran lago que primero fue vaciado y ahora ya ha desaparecido.
La finca también contará con un espacio propio para el ocio nocturno, con una entrada específica. Se situará en una instalación justo detrás del edificio del palacete.
Un restaurante exclusivo y una cafetería complementarán la oferta para los usuarios de las instalaciones.
El complejo dispondrá, asimismo, de salas de reuniones polivalentes pensadas como espacios de trabajo o de convenciones de perfiles empresariales.
La transformación de Mas Sedó incluye además un gran parking con capacidad para 400 plazas, con disponibilidad de carga para vehículos eléctricos.
Los usuarios podrán hacer uso de todas las instalaciones mediante las diversas fórmulas de abono que se pondrán en marcha, aunque también se permitirá el acceso puntual con pagos por uso esporádico.
Los trabajos para hacer realidad este nuevo centro de ocio funcionan a buen ritmo, una vez la promotora obtuvo todos los permisos oportunos.
El proyecto se ha demorado sobre los plazos inicialmente previstos al tratarse Mas Sedó de un bien de interés local. Originario de finales del siglo XIX, entre los elementos protegidos figuran el palacete principal, de 5.000 metros cuadrados y que será totalmente rehabilitado, y distintas especies de árboles distribuidos en toda la finca.
En el futuro el complejo albergará otros servicios relacionados con el deporte, la formación y el bienestar que la propiedad está ultimando mediante distintos acuerdos.