El ámbito del Mercat del Carrilet podría cambiar de forma radical. El Ayuntamiento de Reus tiene la firme voluntad de ejecutar una actuación de reformar del mercado, de todo su entorno y de construir un bloque de viviendas que podría alcanzar las 11 plantas. El proyecto todavía está en fase iniciática pero surge con fuerza como la única posibilidad de relanzar la zona sur como puerta de entrada de la ciudad a través de la plaza del Canal.
«El Mercat del Carrilet ha perdido fuelle y su entorno más inmediato no funciona. El proyecto residencial y urbanístico pretende crear una nueva centralidad». Así se expresa el concejal de Urbanisme, Marc Arza, que ve con buenos ojos este plan de mejora urbana porque puede ir de la mano del sector inmobiliario, que está resurgiendo en la ciudad. Además, la actuación también cobra sentido por las facilidades que presenta el espacio para convertirse en un nodo de servicios y comunicaciones, entre ellos la estación de buses y, si termina materializándose, el apeadero de Bellissens.
La apuesta residencial (la zona también permite un uso hotelero y de oficinas) pasa por la rehabilitación del Mecat del Carrilet, que ha levantado gran interés entre las grandes cadenas de supermercados. Sin ir más lejos, el consistorio ha tenido que prorrogar el plazo de consulta con los operadores interesados, por segunda vez, para poder reunirse con todos los interesados.
El Ayuntamiento también dispone de un estudio complementario realizado por el Institut Municipal de Mercats de Barcelona (IMMB) que aconseja una apuesta por un equipamiento integrado a su entorno, con proyección comercial y potenciando la proximidad. Otro de los condicionantes clave para el éxito definitivo de la reforma integral de la zona ‘6.20 El Carrilet’ pasa por la Generalitat de Catalunya y sus planes de modernizar de manera integral la anticuada estación de autobuses.
El derribo de las naves
Más allá de la futura reforma relacionado con el Mercat del Carrilet, la realidad actual del mercado inmobiliario pasa por grandes actuaciones impensables años atrás a consecuencia de la crisis económica. Sin duda, el más destacado es el macroproyecto urbanístico que se impulsa en el ámbito del centro cívico Ponent, colindante a la avenida Països Catalans.
Las obras en ‘La Coromina Industrial’ incluyen la apertura de dos callesA cargo de la empresa Tarracosol S.L., desde hace unos días ya ha empezado el derribo de las naves de lo que se conoce como la antigua fábrica ‘La Coromina Industrial’. Hasta el momento se ha retirado la uralita de las naves abandonadas previo paso a su derribo. Los terrenos se enmarcan en la manzana que forman las calles Pau Font de Rubinat, Roger de Belfort, Camí de Riudoms y la avenida Països Catalans, justo al lado del barrio Mare Molas.
Según la información recabada por el Diari, la zona dispone de una superficie total de unos 20.000 metros cuadrados, de los cuales cerca de 6.000 estarán destinados a una gran zona verde. Los planes de la promotora, una vez terminado con el derribo, pasa por urbanizar toda la pastilla urbanística y levantar cuatro bloques de viviendas.
Otra de las novedades será la apertura de dos calles que dividirán en tres la actual manzana. En primer lugar se terminará de abrir la calle Frida Kahlo, que transcurrirá del Camí de Riudoms hasta la calle Pau Font de Rubinat. Después está la creación de otro vial, en este caso en la calle Alcalde Pascual, que conectará Frida Kahlo con la avenida Països Catalans. Está previsto que queden destinados a los viales una superficie de 5.000 metros cuadrados. Cerca de la zona, además, también se han iniciado los trabajos de construcción de una zona de aparcamiento gratuito de más de 200 plazas.
Pisos en Onze de Setembre
En la zona norte de la capital del Baix Camp también está previsto que se construya más vivienda. Se trata de la inmobiliaria Unifamiliar Sant Jordi, propietaria de los terrenos en la zona de Mas Mayner, en la avenida Onze de Setembre, y que ya dispone de la licencia de obras. Su intención es levantar 32 pisos de gran tamaño, de entre cuatro y cinco habitaciones, y que, según el proyecto de urbanización del solar, quedarían repartidos entre «uno o dos edificios residenciales».
Esta zona de la ciudad es una de las que más se ha transformado a nivel urbanístico en los últimos tiempos. De hecho, la construcción de las viviendas se enmarca en una segunda fase de urbanización de este solar de Mas Mayner. En la primera se puso en marcha un supermercado de la firma Mercadona, la rotonda entre la avenida Onze de Setembre y la calle General Moragues, la creación de la acera y la habilitación de espacios verdes para uso público. Además, en un futuro próximo la zona sumará un poliligero para los alumnos de la escuela Joan Rebull situado al lado del parque público inaugurado el año pasado y que contó con una inversión municipal de 45.000 euros.
Para terminar con las grandes actuaciones urbanísticas e inmobiliarias también merece una mención especial el que hace referencia a la antigua fábrica de Mas Magrané, en el conocido como Forn del Soto, en la calle del Roser, cerca de la avenida Marià Fortuny. Allí está proyectada la construcción de un centenar más de viviendas en vario edificios junto con una amplia zona verde de una hectárea de superficie. Entre los proyectos mencionados, éste es el que se encuentra en una fase más preliminar.