Las negociaciones a tres bandas –sindicatos, patronal y Gobierno central– para la reducción de la jornada laboral en España a 37,5 horas están rotas. El secretario general de UGT en Catalunya, Camil Ros, se ha desplazado este martes al barrio tarraconense de Bonavista para explicar a los delegados –han asistido unos 125– cómo han ido las negociaciones y también cuál es la perspectiva de futuro que se avecina.
En la demarcación de Tarragona hay 23 convenios de ámbito provincial, y en todos se recoge una jornada laboral por encima de las 37,5 horas a la semana. En el sector público sí que hay algunos empleados que están en esta cifra e incluso algunos de 35. La media de Catalunya se sitúa en 38,6 horas.
«La patronal está encallando el acuerdo», decía Ros. Recordaba que hace un año, en verano de 2023, se iniciaron las negociaciones en serio para avanzar hacia el camino de las 37,5 horas. «Esperábamos alcanzar un acuerdo, al igual que en las subidas salariales», indicaba el líder sindical. Pero no ha sido así, «hemos visto que la patronal quiere alargar las negociaciones para que no haya acuerdo. Y si mientras cae el gobierno, mejor».
Ante esta situación, se ha dado por finalizado el proceso de negociación. «Pedimos al gobierno que llegue a un acuerdo de mínimos con los sindicatos para reducir la jornada a las 37,5 horas», un paso que se tendría que dar a corto plazo, para que antes de finalizar el año la propuesta entre en el Congreso de los Diputados y se pueda comenzar su tramitación parlamentaria a principios de 2025, lo que se podría alargar medio año.
«Creemos que es un término transversal. La gente, vote al partido que vote, quiere trabajar menos. No es un tema de derechas e izquierdas», decía al Diari Camil Ros. En este sentido, recordaba que en julio de 2017, en Catalunya, se aprobó la Renda Garantida de Ciutadania por unanimidad. «Estamos en un escenario similar con las 37,5 horas laborales».
Para tener el máximo apoyo de partidos políticos, Ros recordaba que este lunes el secretario general de UGT, Pere Álvarez, estuvo en Euskadi para hablar con representantes de Bildu y PNV. El objetivo es hablar con todos los partidos que dieron apoyo a la investidura de Pedro Sánchez y también con el PP.
Para el sindicato, la reducción de la jornada laboral sin merma salarial indice directamente en el bienestar de las personas trabajadoras, facilitando la conciliación personal, familiar y profesional.