Las bodegas Corpinnat, especializados en vinos espumosos, incrementaron un 37,5% su facturación hasta los 23,1 millones de euros en 2021. Esta marca, que agrupa varias bodegas del Penedès, también vio aumentar sus ventas, que ya superan los datos prepandemia. En total, se vendieron el año pasado 2,3 millones de botellas, un 35% más que el 2020. Paralelamente, el precio mediano de venta al público creció un 2%, hasta los 17,35 euros por unidad. Cuatro años después de su puesta en marcha, la marca reivindica su apuesta por contratos prolongados con los viticultores, a los que garantiza un precio mínimo por sus cosechas.
El 2021, el 19,7% de la producción de Corpinnat se dedicó a la exportación, un dato que se mantuvo estable, según han explicado este lunes sus responsables en un acto celebrado en Barcelona. Actualmente, los espumosos de la marca se exportan a 55 países con nombres reconocidos como Gramona, Llopart o Nadal y Recaredo, entre otros. De cara al futuro, la estrategia de este grupo pasa para continuar promoviendo los vinos de 'larga crianza', con más de treinta meses de bodega, que ya representan el 83% de botellas vendidas.
En cuanto al trato con los viticultores, Corpinnat resalta a su memoria anual un crecimiento pronunciado. Así, el 2021 acabó con un incremento tanto de la superficie cultivada por la misma marca, que pasó de 604,3 a 644 hectáreas, como de las tierras gestionadas por viticultores independientes ligados al grupo, que pasaron de 192 a 347,5 hectáreas, un 80,9% más.