Grifols ha presentado este martes sus resultados semestrales con unos ingresos de 3,444 millones de euros, un aumento del 7,5% en comparación con el mismo período del año anterior, un EBITDA de 791 millones (un +24,1%) y un beneficio neto de 36 MEUR.
“Estamos orgullosos de haber obtenido unos sólidos resultados trimestrales y semestrales, y reafirmamos nuestras previsiones para el ejercicio 2024”, ha señalado el presidente ejecutivo de Grifols, Thomas Glanzmann. Sin embargo, la multinacional farmacéutica ha vivido un nuevo susto y ha sido suspendida de cotización durante unas tres horas tras una “discrepancia contable” detectada por su nuevo auditor, Deloitte.
“Seguimos centrados en reforzar nuestra gobernanza y en ejecutar la estrategia establecida, que incluye la gestión de la deuda. Además, esperamos que nuestra alianza estratégica con Haier impulse oportunidades en los mercados de plasma y diagnóstico en China”, ha continuado Glanzmann, quien ha destacado el crecimiento en todas las unidades de negocio, especialmente en el segundo trimestre del 2024. Biopharma ha facturado un 8,9% más en el primer semestre, gracias sobre todo al crecimiento de la franquicia de inmunoglobulinas (+13,1%) y al aumento de la demanda en regiones clave como Estados Unidos y Europa. En paralelo, las ventas de albúmina se han incrementado un 9,6% este semestre y un 12% en el segundo trimestre de 2024, impulsadas por la demanda en China.
Flujo de caja positivo y reducción de la deuda
La facturación en el área de Diagnóstico fue de 322 MEUR en el primer semestre, un +1,9% en términos comparables y un -3,7% en términos reportados. En cuanto a los ingresos de Bio Supplies, aumentaron un 32,6% hasta los 110 millones de euros. El suministro de plasma se incrementó mientras que su precio frenó la bajada del primer trimestre (-2% en marzo). En cuanto al resto de indicadores financieros generales, Grifols destaca la generación de flujo de caja libre (FCF) -con resultados positivos en el segundo trimestre de 57 MEUR-, la reducción de la ratio de apalancamiento a 5,5x y la rebaja de la deuda, que ahora se sitúa en 8.262 MEUR.
“A 30 de junio y excluyendo los 1.600 MEUR netos procedentes de la transacción de SRASS, Grifols tiene una posición de liquidez de 915 millones de euros y una posición de caja de 568 millones”, concluye la multinacional farmacéutica. Grifols prevé que el crecimiento de los ingresos al final del ejercicio sea superior al 7% y que los ingresos biofarmacéuticos aumenten entre un 8% y un 10%. También prevé un EBITDA ajustado de más de 1.800 MEUR y un margen de EBITDA ajustado de entre el 25% y el 26%.